⸻ O5. Yeonjun

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«narra yeonjun»

No tenía ni idea de cómo matar a esas cosas. Si les disparabas, no funcionaba. Si les cortabas la cabeza, tenías que correr porque a los dos minutos les volvía a crecer. Era mucho más fácil para mi asesinar zombies que estas malditas criaturas desconocidas. Creí que cuando llegaría un apocalipsis sería uno de zombies, esos bastardos hijos de puta si son más fáciles de asesinar que estas cosas.

Por la calle, mientras corro, escucho que se les llama de muchas formas, yo prefiero decirles como desde el minuto uno: mierdas del infierno, eso prefiero.

No había comido nada desde ayer, solo salí de la casa con un hacha en la mano y nada más, había buscado en varios supermercados a ver si tenían cosas que pudiera comer o pudiese guardar, pero todo estaba saqueado, solo había unas cuantas botellas de jugo así que no me quedo de otra más que tomar cinco y un paquete pequeño de pan relleno.

Ni siquiera eso me lleno, por eso ahora estoy buscando en supermercados más grandes y alejados de la ciudad. No sé a dónde me estoy dirigiendo, no tengo ni idea de que hacer, solo sé que esconderme y correr está dentro de mis planes de supervivencia.

Yeonjun: ¿Esta cosa funcionara?

Me pregunté a mí mismo cuando vi una camioneta, no tenía llaves, pero sabía cómo encender un auto cuando no había llaves a la vista. De algo me sirvió andar en las calles a temprana edad y técnicamente volverme un pandillero. Que viejos recuerdos, prefiero mil veces esa vida que la vida que estoy teniendo ahora.

Al lograr encenderlo, puse el hacha envuelta en una sudadera que había allí mismo, arranque a toda velocidad rompiendo la puerta corrediza del garaje de aquella casa. Llamé la atención de varias mierdas del infierno y tuve que acelerar para que no me alcanzaran. ¿Qué acaso no se cansan de joder tanto? Bueno, al menos en el día no andan tan activos, porque lo que es la noche... joder tengo que mantenerme alerta de que ninguna de esas cosas me ataque.

Di rondines por la ciudad, tratando de buscar algún seguro donde quedarme porque el lugar de anoche no era una muy buena opción. Moraleja: no volver a dormir dentro del drenaje de la ciudad.

Yeonjun: Oh por una reverenda mierda lo que me faltaba.

Maldije cuando la camioneta se detuvo, no tenía ya más gasolina y la batería tal parece que estaba acabándose, golpeé varias veces el volante y salí de la camioneta tomando el hacha, miraba a todos lados, pero no había nadie cerca así que tenía campo libre para avanzar.

En mi campo de visión, un taller mecánico se cruzó frente a mí, supuse que estaba abandonado así que decidí encaminarme hasta allá para ver si era un lugar seguro y esconderme allí tan siquiera por esta noche.

Llegando, intente entrar por la parte de enfrente pero no podía, parecía que estaba atascada o algo así. No me iba a rendir, se trataba de salvar mi pellejo una noche más así que iba a entrar a como dé lugar. Fui hasta la parte de atrás y ¡bingo! una puerta trasera había que también estaba atascada, pero no me detuve, la pateé con fuerza haciendo que las cosas que había detrás de ésta se cayeran causando un estruendo molesto.

Yeonjun: Limpio, lugar limpio por fin.

Xxx: ¿Qui-quién e-eres t-tu?

Sentí la punta de un arma en mi cabeza, la voz del chico sonaba temblorosa y noté la mochila que había frente a la puerta de entrada. Ahora entiendo. Me gire despacio para mirar al chico que estaba apuntándome con un arma, su semblante era frágil y sus labios estaban temblando. Mierda pero que chico tan guapo.

¿Heterosexualidad dónde estás?

Yeonjun: ¿Quién eres tú?

Xxx: Yo pregunte primero.

ᴀʙʏꜱꜱᴜꜱ | ᴛᴏᴍᴏʀʀᴏᴡ x ᴛᴏɢᴇᴛʜᴇʀDonde viven las historias. Descúbrelo ahora