Las cosas raras del amor (LawRusso)

Sorpresas

Julio 1985

Ali modelaba su nuevo vestido ante el espejo, era lo suficiente holgado como para ocultar su avanzado embarazo. Su mamá eligió otros modelos similares que igualmente le encantaron. Mientras su mano se posó en su vientre escucho el sonido del timbre, pero no hizo mucho caso, conociendo la vida social de su madre debía ser alguna de sus amigas que venían a conseguir información sobre el rumor de su hija embarazada.

-Te vez hermosa – la voz de Daniel hizo que levantara la vista observándolo a través del espejo - ¿Cómo está mi sobrino o mi sobrina? – Ali sonrió y le invitó a sentarse

-Por fin llegó el día donde lo sabrás, hace poco regrese de mi cita con la doctora y me entregó un sobre donde viene escrito el sexo del bebé – abrió el pequeño cajón de su mesita de noche – toma – se lo dió – serás el primero en descubrirlo, adelante

- ¿Johnny aun no lo sabe?

-Él ... él no fue conmigo, le pedí que no lo hiciera – suspiro – la última vez no me gusto

- ¿Por qué?

-Escuchamos el latido del bebé y yo perdí el control, por un momento quise dejar los planes y formar una familia con Johnny

- ¿Qué te detuvo?

-La futura culpa, imagine que algún día me sentiría tan frustrada y descargaría todo eso con Johnny y el bebé, no es justo ni para ellos – tomo una vitamina – anda ábrelo, después ¿Podrías decírselo a Johnny? – Daniel asintió.

El pelinegro analizo lo que venía escrito en el papel, sus ojos brillaron y su sonrisa se ensanchó.

-Tendré una sobrina – Ali se sorprendió

-Daniel, cuídalos mucho por favor, por lo menos hasta que vuelva

[.]

-Daniel – Johnny lo movía ligeramente – Daniel ¿estás bien?

-Eh si – trato de dejar de pensar en ese recuerdo y volvió su atención a Johnny

-Te decía que Sam quiere ir al centro comercial

-Claro ¿después de la escuela?

-Sí, pasamos por ella a la escuela y nos vamos

Han pasado varias semanas desde que le pareció ver a Ali en la escuela de Samantha y ese constante recuerdo apareció en su mente en especial la parte donde decía que volvería, Daniel hace mucho tiempo descarto la posibilidad de que Ali regresará, en propias palabras de los señores Mills, Ali vivía feliz en Colorado y a punto de iniciar la residencia en uno de los mejores hospitales del lugar, no podía ser posible que abandonara el sueño de sus padres solo para regresar y tratar de entrar en la vida que visiblemente ya no le pertenecía. Al principio el pelinegro se martirizaba por desear que Ali jamás volviera, odiaría tener que dejar ir a Samantha y perder el amor de Johnny.

-Dani – el rubio estaciono el auto - ¿Qué ocurre?

-Nada

-Desde esta mañana te noto distraído y preocupado, no me digas que no pasa nada – Johnny tenía una suposición - ¿Es porque creíste verla? Deja de preocuparte por eso Samantha te quiere y yo te amo

-Lo se y yo los amo a los dos – sonrió tratando de parecer tranquilo – solo me preguntaba Cómo lo explicaríamos a Sam si ella llegara a reaparecer

-No vale la pena estresarnos por algo que no ha pasado, mejor disfruta este día

[.]

-Sam ve más despacio no te alejes mucho – gritó Daniel