IV

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Al llegar al departamento de Harry este abrió la puerta y caminó rápido hacía su baño dejando atrás a Louis, no podía creer que el fotógrafo estuviera en su casa, era tanta la adrenalina que sentía por eso que ni siquiera podía sentir el dolor de su mano, cuando salió con el botiquín a su sala Louis estaba parado con la mirada perdida en la foto familiar que el rizado tenía colgada justo encima de su televisor, era en realidad un retrato de él con su madre y hermana, un regalo que le había hecho Joseph para su cumpleaños número veintiuno.

- Aquí está el botiquín, de verdad esto no es necesario Louis puedes irte a casa, creo que estaré bien, -El castaño giró su mirada esta vez centrándola en Harry, rodó los ojos con gracia-.

- ¿Qué tan terco puedes llegar a ser, eh?, -Preguntó en un tono divertido mientras le quitaba el botiquín a Harry-, Ya estoy aquí, no me demoraré nada así que me iré pronto.

Harry mordió su mejilla interna, no pudo evitar soltar una sonrisa, este hombre realmente era un ser de luz, ¿tan bueno iba a ser?, cuando Louis dio dos palmaditas a su lado del sofá invitándolo a sentarse Harry salió de su trance e hizo lo que el otro le estaba invitando. El más bajo sacó con mucho cuidado la toalla de papel que cubría la mano del rizado y los dejó encima de la mesa, inspeccionó la herida y luego sacó del botiquín un poco de povidona yodada y algodón, comenzó a limpiarla con delicadeza.

Harry olvidó cómo respirar el tiempo suficiente como para que cuando logró volver a recordarlo era bastante el aire que necesitó, Louis subió la mirada de manera tranquila y torció la boca, la luz tenue de su departamento y el silencio sepulcral hacía parecer de este momento uno más de sus sueños, que en realidad Louis no estaba aquí junto a él y que esto era producto de su imaginación, el dolor en la mano lo hizo sacar por completo ese pensamiento de su cabeza.

- Mierda, -Se quejó-.

- Lo siento, -Se limitó a decir el otro mientras terminaba de curar su mano-, Bueno...., creo que estarás bien, al parecer no necesita puntos, -Informó envolviendo la mano del rizado con una gaza-.

- Muchas gracias.

- No hay de qué, -Louis elevó sus hombros restándole importancia al gran favor que le estaba haciendo en estos momentos-, Bueno..., -Se levantó del sofá-, Creo que es hora de que me vaya, es muy tarde.

- Si, te llamaré un taxi no es seguro que andes a estas horas solo en la calle, -Harry tomó su teléfono buscando el número de radio taxi que era de su confianza-, Aunque si gustas..., podrías tomar un café antes de irte, como agradecimiento por lo que hiciste por mí, ya sabes, mi mano, -Elevó su mano herida con gracia-.

Louis lo pensó unos segundos, le había dicho a Liam que no lo esperara hoy porque sabía que se le haría tarde en el evento, aunque jamás pensó que iba a terminar la noche en el departamento de Harry Styles curándole la mano ¿que eran unos minutos menos de sueño? además necesitaba un café, había bebido un poco más de la cuenta, Harry lo miraba expectante mientras mordía el interior de su mejilla, parece que era una especie de tic que tenía el rizado cada vez que estaba nervioso, Louis asintió y Harry sonrió con hoyuelos y todo.

- ¿Te gusta con leche?, -Preguntó mientras ponía el agua a hervir y preparaba dos tazas en la mesa americana de su cocina-.

- Solo un poco, -Respondió Louis apoyando ambos brazos en la mesa justo frente a Harry-, Y solo con una cucharada de azúcar, -El ojiverde asintió sirviendo la cantidad de azúcar recomendada-. Y .... ¿Las dos mujeres de ese cuadro que tienes en la sala..., quienes son?.

- Mi madre y mi hermana, -Respondió Harry sirviendo el agua hervida en las tazas, le acercó la suya a Louis-.

- ¿Son de aquí?, -Preguntó mientras Harry servía la leche-.

A través de ti || LS (Larry Stylinson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora