12. Encuentro

7.9K 1.4K 742
                                    

Toda la semana Jimin no fue al instituto.

Toda una semana Yoongi sintió que moriría de la angustia, al no saber cómo se encontraba el lindo chico, ¿Estaría bien?, ¿Su resfriado habrá empeorado?, Y aunque tenía la dirección de él, no se atrevía a ir, pues le parecía que sería una falta de respeto, razón por la que seguía sufriendo de angustia.

Toda aquella semana, Jimin paso recuperándose poco a poco, escribiendo nuevas historias, terminando trabajos que su madre iba a recoger por él, trataba de tener su mente realmente ocupada y olvidar por unos días, no sentir ningún tipo de presión, ni preocupación y sobre todo pensar en sus verdaderos sentimientos.

- ¡Jiminie, ven a cenar! - Grito Mina, obteniendo la atención del mencionado.

Jimin dejo su trabajo sobre la nueva historia que su mente estaba creando, para salir de su habitación y poder cenar con sus padres.

Al bajar los vio reír demasiado melosos como siempre, aquella imagen que Jimin siempre le molestaba ver porque sus padres son unos románticos, está vez no la interrumpió, los dejó ser y sonrió al sentirse feliz por ellos y pensó que en verdad tenía a los mejores padres del mundo.

Espero unos segundos nada más, hasta que los Park se alejaron y siguieron con su plática, mientras sonreían contentos como siempre estaban. Jimin decidió entrar a la cocina y tomar asiento en su lugar, sintiéndose mejor y con muchas más energías.

- Una semana no fuiste a clases Jiminie, que bárbaro eh - Dijo Heechul tratando de reprimir a su hijo, fallando en el intentó - Jamás creí que te tomarías tantos días de des....

- Tú no digas nada papá, dice mamá que tú a veces faltabas semanas enteras - Acusó el menor.

- Pero salía bien en todas mis materias - Dijo con superiodad el mayor de la familia.

- Yo soy mejor que tú Heechul, no te hagas y asi falte todo el año, siempre saldré en primer lugar - Respondió Jimin con su ego en alto.

- Ya dejen de discutir por tonterías, los dos son tal para cual, como bien dicen, de tal palo tal astilla, son como dos gotas de agua, además, yo era mejor que ustedes dos juntos - Mina no pensaba quedarse atrás.

Tanto Jimin como Heechul se lanzaron a las carcajadas y si algo que Mina odiaba era que se burlaran de ella, más si se trataba de su esposo e hijo, sin embargo el momento era realmente memorable, por lo que dejó pasar las burlas.

Los tres cenaron en completa tranquilidad, acompañados de risas, viejas anécdotas de parte de Heechul y Mina. Jimin se sentía mucho mejor de salud aunque no estaba del todo seguro que ocurrirá cuando regresara a clases.

Pero eso estaba por verse y ese fin de semana quería estar tranquilo y relajado.

La mañana del sábado llegó demasiado rápido para el gusto de Jimin, quien quería seguir durmiendo, pero el ruido de sus padres no lo dejaban.

Mina tocó la puerta de la habitación de su hijo, para después entrar y encontrarlo enrollado entre las sábanas, con el ceño fruncido y sus labios con un tierno puchero.

- Minnie, levántate cariño, apresúrate - Dijo Mina, mientras movía a su hijo.

- ¿Para qué mamá?, ¡Es sábado! - Refunfuñó el menor.

- Tú padre y yo debemos salir urgente durante dos semanas de viaje de negocios, debes quedarte solo, pero tú padre necesita que lo ayudes con el equipaje.

- ¿Otro viaje?, Pero si hace menos de un mes fueron a uno - Jimin odiaba quedarse solo y ya sabemos la razón.

- Lo sé cariño, pero será por poco tiempo.

El chico de la esquina ~YM~ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora