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Narra _____ Larrea.

Hoy regresa Liv del viaje. Antes de venir a recogerla al aeropuerto ya había guardado el guión en la zapatera, aún así no le permitiría entrar a mi cuarto. Era capaz de forzar el candado con tal de encontrar algo con que joderme, y con algo así, seguro le diría a mamá y ella sería capaz de meterme hasta a un hospital psiquiátrico.

— ¡_____! — Dijo Liv saludando desde la distancia. — Hola. — Me dió un beso en la mejilla.

— ¿Ya tienes todo?

— Sí, podemos irnos ya.

No respondí y fuimos hacia al auto. No pensaba hablar con mi hermana, ninguna de las dos tolera a la otra. Hablamos cuando las cosas son verdaderamente necesarias.

— ¿Puedo ver tu tatuaje? — Cuestionó nerviosa. Era raro en ella, siempre estaba en una posición de seguridad y a la defensiva. Solo se ponía así con mamá.

— Ahh... Si, supongo. — Levante un poco mi playera y le mostré mi brazo. — Ahí está.

— Es lindo. — Sonrió.

— ¿Estás bien, Liv? Nunca me sonríes y estás rara. Nunca eres así conmigo. ¿Pasa algo?

— Escucha, la razón por la que volví es porque te quiero pedir una disculpa, en este último viaje me di cuenta de cómo mi mamá se expresa de ti y que yo nunca hice nada al respecto. Tu siempre has estado para mi, eres mi hombro para llorar cuando lo necesito, mi cómplice en varias ocasiones Pero yo nunca he sido la tuya. En todos los aspectos. Reconozco que he sido una completa perra contigo, perdóname _____. Le dije a mi madre que dejara de llamarte ''inútil'', ''estúpida'' y de las muchas otras formas en las que lo hace. Ella me dijo que como ahora estaba de tu lado, que me regresará contigo, si tanto me molestaba, y como lo hacía... aquí estoy. — Sonrió con lágrimas en los ojos.

— Hey, Liv. Está bien. Ven aquí. — Me estacioné frente a la casa y la pegué a mi pecho acariciando su cabello. — Somos hermanas y siempre voy a estar para ti, así mates a alguien... yo te voy a ayudar a esconder el cuerpo y evidencia. — Soltó una leve risita y se separó de mí. Rápidamente sequé un par de lágrimas que tenía en el rostro. — Te quiero, hermana.

— Y yo a ti, hermana. Tu y yo somos como Tori y Trina.

— Pero tú eres Trina. — Ambas reímos.

(...)

Pasamos el resto del día Liv y yo viendo películas juntas, en este momento quería pasar tiempo con mi hermana así esto fuera una mentira. Quería ser su amiga por un tiempo. Billie podía esperar y no saber que no estoy con ella. Había terminado la tercera película, Olivia se había quedado dormida. La llevé a su recámara y yo me fui a la mía, me preparé para dormir y saqué mi guión.

(...)

— ¿Ya estas lista, cielo? — Preguntó Billie mientras terminaban de maquillarla.

— Creo que ya falta poco, ¿o me equivoco, Cleo? — Le pregunté a mi stylist mientras terminaba mi peinado.

— Así es, sólo aplicó el fijador y listo. — Contestó con una sonrisa que pude ver desde el espejo.

— ______, falta el iluminador en el cuello y tu seno. ¿Te lo pones tú o puedo hacerlo? - Cuestionó Natalia, la maquillista.

— ¡Yo se lo pongo! — Gritó mi novia con entusiasmo parándose al instante dándole poca importancia a su maquillaje que aún no terminaba. Todos en la habitación reímos. Finneas y Claudia se rieron un poquito más que todos.

Nuestra Realidad. Billie Eilish y _____.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora