Alan y El Anillo Mágico De Hielo

Capítulo 44: Una terrible tragedia.

Alan va con María Fátima y con Christopher, le dice a éste último -hola amigo, ¿cómo te sientes? -ya me siento mejor, gracias -contesta el dios del hielo- ¿sobrevivirás? -pregunta Alan, Christopher dice con tristeza -no -Alan y María Fátima se voltean a ver y empiezan a llorar -lo cierto es... que aunque tenemos poderes muy fuertes como los de un dios, en realidad podemos morir -dice el dios del hielo, y posterior a eso dice -háganme un favor ¿sí?, vayan a la ciudad de Texalco en la cuadra del cine, y pregunten por los señores Alberto, Roberto y Gilberto Villaseñor, son mis hijos, cuando los encuentren, les dan la noticia de que fallecí -lo haremos -dicen Alan y María Fátima entre lágrimas -muchas gracias, estoy feliz de haberlos conocido -dice el dios del hielo, cierra los ojos y muere.

De ahí, Alan y María Fátima se llevan a Christopher cargando y lo acuestan en la cama de su cuarto en la guarida de hielo. Después ambos salen al bosque, congelan todas las plantas incendiadas, apagan el fuego de las casas y de ahí cada quien se va a su casa.

Son las once de la noche, después de una noche dura, María Fátima entra a su casa donde están sus padres y su tía Fátima, cuando la ve, corre a abrazarla y le dice -lo logramos tía, el dios del fuego se murió -Fátima abraza a su sobrina y sonríe.

Alan también entra a su casa, al ver a sus padres esperándolo, corre, los abraza y les dice -hemos ganado, el fuego se apagó -y luego se van a dormir.

Al día siguiente, viernes 22 de septiembre de 2017, saliendo de la preparatoria, Alan y María Fátima les explican la situación a sus padres y de ahí se van en camión a Texalco. Al llegar a Texalco, encuentran a los señores Alberto, Roberto y Gilberto Villaseñor, les dicen que su padre ha muerto y les piden que los lleven a la ciudad de Teluanpic que fue donde murió, los señores los llevan en su auto.

Al llegar a Teluanpic, se van al bosque San Juan, entran a la guarida de hielo y los señores miran a Christopher muerto, seguido de eso, le hacen un funeral esa noche en el bosque, y al día siguiente, sábado por la mañana, lo sepultan en el cementerio de Teluanpic donde asisten Alan, sus padres, María Fátima, sus padres, su tía Fátima y algunos conocidos de la familia Villaseñor.

Desde este momento, la vida de Alan comienza a cambiar, a partir del lunes 24 de septiembre empieza a trabajar en la papelería Martínez por tres semanas para ganar $1,500 que les debe a sus padres, al ganarlos se los paga a sus padres y deja de trabajar.