capitulo 7 marcas

238 158 16
                                    

Advertencia⚠️no apto para sensibles

el dolor y el temor que veo en tus pequeños ojos mi querido Víctor me pide a gritos que siga golpeando tu rostro una y otra vez hasta que esa maldita mirada desaparezca —ríe burlándose de la situación. Pero no te preocupes, no pienses que esto llego a su fin, tu padre es mucho peor que yo maldito mocoso
—suelta una gran carcajada, el pequeño lanza un grito de terror al ver como ella se acerca enfurecida
.no mamá, por favor, déjame, no quiero
—llora sin consuelo alguno. Sin piedad lo golpea hasta dejarlo casi inconsciente, metiéndolo en el horno de la cocina que hace poco estaba encendido, una de las torturas favoritas de su madre, quien debió cuidarlo, pero solo le enseñó lo horrendo de la vida. Cuando aprenderás hijo —su rostro muestra una total frialdad y una sonrisa malvada.

No te voy a dejar salir hasta que tu papá llegue estúpido, inútil. Si escuchó tan solo un pequeño ruido, créeme mocoso —se agacha frente al vidrio que permite ver hacia dentro del horno y lo mira con los ojos inyectados de rojo por el odio. Juro que te cortaré la otra oreja y me la comeré o quizás uno de tus dedos.

3 horas después

Ya llegué estúpida mujer —habla con un tono firme y desafiante mientras se acerca a ella. Hola cariño como te fue en tu viaje —su voz comienza a temblar, e intenta controlarlo. Donde estabas maldita, inútil —el hombre grita como si tuviera un gran rencor hacia la persona que tiene de frente.

Perdón cariño estaba castigando a esa basura —tiembla. Donde está ese maldito engendro, quiero que me lo traigas de inmediato o tú sufrirás las consecuencias zorra —una sonrisa se marca en su rostro.

—Pasos hacia la cocina. Víctor inconsciente y con quemaduras en su cuerpo, es arrastrado por esa persona que él llama madre.

Acá está el estorbo, cariño hace lo que quieras con él —en sus brazos se encuentra una figura diminuta, casi sin vida y con su cuerpo todo lastimado.
  —Cachetada. Despierta maldito animal —lo golpea. Habré esos asquerosos ojos o juro que te mataré.

No por favor papi ya no me dañes más
—voz quejumbrosa. Maldito no me digas papi —sin una pisca de piedad arroja al niño contra la pared. Eres solo mi entretenimiento, ya que la estúpida de tu madre no sirve ni para dar placer, es una asquerosa buena para nada.

Tu pequeño estorbo tienes que saciar mi apetito, satisfacer mis deseos, necesidades, por eso sigues aún con vida —muestra un rostro totalmente extasiado tanto que su sola mirada delata todo. Ni tú ni tu madre podrán escapar de mis manos. Ahora sabrás lo que es bueno ...

RASTROSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora