Estamos rodeados y todos se están angustiando cada vez más.
Veo al capitán y a su hijo entrar dentro. Han dejado al mando al calvorota hasta que todo pase, si es que llegamos a estar vivos a medio día, cosa que dudo mucho que ocurra.
Seguramente se hayan ido a encerrar los dos en el camarote, y a llorar como cachorrillos asustados. Patético.
De tal palo tal astilla.
-¡Mantener vuestra posición! ¡Cualquiera que huya me encargaré personalmente de que no vea más la luz del sol!-ordena el más fiel y leal secuaz de Gurbert el Tuerto.
Todo el mundo le hace caso.
Excepto yo.
-Maisie, ¡no!-me espeta el profesor Dylle.
El calvorota se da cuenta, por el grito de Christian, que desobedezco sus ordenes.
-No podemos quedarnos a esperar que los marineros vayan uno a uno cayendo al mar y ahogándose. Necesitamos un plan-me acerco al grandullón y expongo mi idea.
Él frunce el ceño.
-¿Y qué propones pelirroja? Ya es un poco tarde para hacer algo, ¿no te parece? Esperaremos y cortaremos a esas furcias en dos-dice con su tono de voz que refleja brusquedad y poca maña.
Según termina de hablar se oyen los cantos de las sirenas más altos y...claros, ya que empezamos a escuchar una melodía que hace que se me ericen los pelos de la nuca.En la tierra prometida,
hay oro y valor
Un joven muy apuesto,
para hacerme compañía
Ven marinero,
a nuestras aguas turbias
Nosotras te mostraremos
lo que es el gran amor
Además de fama y fortuna,
un beso te daré yoSe repite la misma melodía unas tres veces. Todos los hombres, curiosos e hipnotizados, se acercan a los extremos del barco para ver a las bellas criaturas.
Vicky y yo nos miramos con nerviosismo. ¡¿Qué vamos hacer?!
Veo al profesor Dylle y a Noah acercarse hacia la muerte.
Vicky está sujetando a George, que se resiste y avanza como un zombie.
Esperad, ya está, ya lo tengo.
-Vicky, hay que atarles a todos al mástil y a donde podamos-le digo y corro hacia ella con varias cuerdas que les mantendrán quietos.
Ella irá atando a todos los que yo vaya capturando.
Ata, temblando, a George.
Las cuerdas le mantienen inmóvil. Nuestra idea puede funcionar.
Ella me sonríe y me apoya en el precipitado plan.
Cojo la cuerda más grande que encuentro, que medirá como unos treinta metros. Es perfecta.
Vicky ata uno de los extremos al mástil y comienzo a correr por el borde del barco, con la espada en la mano para de paso deshacerme de alguna de esas bestias marinas.
Corro lo más rápido que puedo y paso la cuerda por las cinturas de varios piratas que consigo arrastrar hasta la vela para que Vicky los retenga ahí.
Pero no consigo coger a Noah y cinco hombres más, los más adelantados para precipitarse por la borda.
Uno de ellos es el calvorota. Genial, menudo placer va a ser salvarle la vida.
Al menos el señor Dylle está a salvo.Continuará...
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Lone wolf (loba solitaria)
Teen FictionMaisie es una adolescente que vive en una pequeña localidad perdida en el bosque de el estado de Virginia. Todo el mundo se conoce en Dark Forest y ella de repente empieza a interesarse por el "chico de mala reputación", que se ve obligado a volver...