Narra Plan:Esta mañana llegó el conserje a buscar a mi amigo, dijo que alguien vino a buscarlo temprano; pero que no lo habían dejado pasar. Me preocupa un poco, porque él siempre avisa cuando ha invitado a alguien que no conocemos; sin embargo, esta persona apareció de repente y ni siquiera dijo su nombre.
Con esa preocupación salgo del departamento directo al parque, ya que recordé que me dijo que estaría ahí. Pero, desde hace unos días, alguien ha estado molestándome, es un tipo raro, con un terrible mal humor y creí que me había librado de él la última vez.
La primera vez que nos encontramos, fue con una maldita motocicleta; el muy imbécil casi me pasa llevando en los neumáticos. Apenas voy entrando en el parque, cuando siento que me he vuelto loco porque estoy escuchando el ruido de esa estúpida máquina, y pronto lo veo.
- ¡IDIOTA! - Unos segundos más y ya no estuviera aquí.
- Tus insultos no me ofenden... - Dice bajándose de la motocicleta. - Pero, me da curiosidad, ¿estás aquí por mí?
- Solo una persona desesperada te buscaría.
- ¿Así que estás desesperado por mí? ¡Quítate la ropa y te quito las ganas!
No pude soportarlo más, este día ando de muy mal humor, como para tolerar a este pedazo de imbécil. Así que sin dudarlo, le lancé un fuerte puñetazo que lo hizo tambalear; pero, cuando iba a gritarle, me agarró de la cintura y del cabello, para robarse mi primer beso.
Mis piernas temblaron al momento de sentir sus labios junto a los míos, aunque debo reconocer que no se sentía tan mal. Pasó su lengua sobre mis labios instándome a separarlos; y me gustó tanto, que abrí mi boca, entregándome por completo a ese beso.
- ¡Todos nos miran! Te pondré esto y vámonos.
Me colocó el casco, se subió a la motocicleta y extendió su mano para que yo también subiera; y siendo sincero, me vi tentado a subir. Pero recordé dos cosas importantes; en primer lugar, este es el idiota al que odio y en segundo, debo buscar a Perth para decirle lo que sucedió hoy.
- ¿Piensas que me robas un beso en el parque y estaremos bien? ¡No tienes permiso de entrar en mí, eso debes ganártelo idiota!
- Sí quería meter, pero comida en mi estómago; quería invitarte a desayunar en la cafetería de en frente. - Me sentí avergonzado de mis palabras cuando señaló el lugar.
- Pues, a mí eso no me constaba. - Otra vez esa sonrisa arrogante.
- Bueno, entonces solo te dire que... ¡La próxima vez que me golpees, te llevaré a mi casa, te quitaré toda la ropa, estarás amarrado a mi cama y no pediré permiso para estar dentro de ti!
No sé la expresión que puse, pero el muy soberbio, sonrió, se puso su casco y después de encender la motocicleta, salió muy rápido del parque. Aunque, lo que me intriga, es que de alguna manera, me excité escuchando lo que quiere hacer conmigo si vuelvo a golpearlo.
- ¿Plan? ¿Qué haces aquí?
- Oh, Perth; necesito decirte algo.
- Te presento a Saint; es el chico del que te hablé.
- ¡Hola Saint! Es un gusto conocerte. Perth, es un asunto importante.
- Adelante dilo, no te preocupes por Saint.
- Llegó alguien a buscarte esta mañana a tu departamento.
- ¿Quién es? Y ¿qué quería?
- No sabría contestar esas preguntas; los de seguridad no lo dejaron entrar porque no dijiste que llegaría un extraño y... ¡Escapó cuando lo preguntaron su nombre!
Espero no estar viéndome como un demente que no tiene control en absoluto; pero, después de lo qué pasó hace dos años y que mi amigo no recuerde nada, tengo mucho miedo de que alguien venga y lo acuse de aquello o peor aún, que vengan a vengarse de él.
Narra Perth:
Siempre que Plan quiere decirme algo, es un poco dramático para hacerlo y su aspecto no era muy serio, creí que no era un mensaje importante. Su cabello estaba despeinado, sus labios inflamados, con la ropa un poco desordenada y con expresión de sorpresa en su rostro.
- ¿Invitaste a alguien a tu departamento?
- Sabes que no, sería incapaz de hacerlo; y menos sin informar a nadie.
- ¡Oye, si tienes un problema, ve a resolverlo! ¡No te preocupes por mí; de todas formas, nos veremos mañana en tu oficina!
- Muchas gracias Saint. - Le di un beso en su mano por ser tan gentil y dulce. - Llámame, y te espero mañana.
Salgo corriendo con Plan después de despedirme de Saint; llegamos hasta la oficina de seguridad del edificio donde vivo. Ellos me explicaron lo que sucedió, según lo que entendí, es que fue más o menos antes de que Saint me encontrara en el parque y curiosamente andaba con mi gorra.
Su abrigo era muy grande y con su rostro cubierto en su totalidad por mi gorra, no pude definir si es hombre o mujer. El conserje que lo atendió es un señor de mucha edad, así que no logró definir muy bien quién era; estoy tan decepcionado, si tan solo me hubiese quedado unos minutos más.
Aunque tampoco es que prefiera estar aquí, antes que pasar mi tiempo con Saint, pero, por primera vez en dos años tuve la oportunidad de conocer a esa persona; saber lo que en verdad pasó, pedirle perdón y enmendar los daños; sin embargo, no estuve.
- ¿Perth?...
- Estoy bien Plan; no saldré hoy, si quieres salir, hazlo.
Sin esperar su respuesta, salí corriendo hasta mi departamento, la verdad me siento muy mal, ¿por qué ahora que decidí dejarlo atrás? No entiendo esto, me siento desconcertado, incómodo, como si el tiempo estuviera jugando conmigo o de alguna manera, como si se burlara de mí.
Plan entendió el mensaje de dejarme solo por el resto del día, después de pensar mucho, logré despejar mis ideas y controlarme. A la mañana siguiente no fui al parque, porque me quedé dormido y ya era hora de estar en la oficina, así que solo me alisté para eso.
- ¡Uy! Llegas justo a tiempo, ¿lo conoces? - Así me recibió Sammy.
- ¡Saint! Perdóname, no les dije que venías... Bueno, él será mi asistente.
- Oh, que bien, ¡Un gusto conocerte, soy Sammy!
- ¡Y yo soy Saint! El gusto es mío...
La asistente, que ahora solo trabajará para Sammy, aceptó ayudar a Saint para aprender todo lo que necesitaba para el puesto. Él es muy perceptivo, así que rápidamente aprendió, tanto que por la tarde, prácticamente lo hizo solo; y después de mi última sesión, pidió permiso para entrar en mi oficina.
- ¿Necesitas algo más? ¿Ya quieres retirarte?
- No, yo solo... quiero saber, ¿estuviste ocupado esta mañana?
- No, ¿por qué lo preguntas?
- Es que, creí que nos veríamos en el parque y no llegaste; aparte de eso, no contestaste mis llamadas ayer.
- Oh, sí, es verdad, ¡Perdóname! Me quedé dormido.
- Pensé que había hecho algo malo.
- ¿Tú? ¡Una persona tan dulce! ¿Qué podrías haber hecho?
- Bueno, tal vez porque te cobré lo de la tintorería.
- Mira, eso fue mi culpa, no tuya; y con respecto a las llamadas y esta mañana... - Puse mis manos en sus mejillas y dije: - ¿Quieres cenar esta noche conmigo para disculparme?...
ESTÁS LEYENDO
No Deberías Amarme "PinSon"
FanfictionPerth es un Psicólogo que recién se graduó de la universidad, se va a celebrar con sus amigos y acaba tan borracho que despierta en un hotel sin recordar nada, ni siquiera que había llegado acompañado... Es se convierte en una experiencia traumática...