The Truth Untold | Kookv

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Aquella mañana sus padres le avisaron que irían a traer a su hermana a su casa en Daegu, pues le habían pedido volver a Busan por unos días porque la extrañaban bastante.

Su hermana, Joohyun, era bastante rebelde y no soportaba pasar mucho tiempo con ellos, por eso vivía sola y los visitaba muy pocas veces al año, poniendo excusa para no entrar a ese ambiente tóxico y excesivo de su antiguo hogar.

— Mami, ¿Jungkook puede venir en la tarde a ver películas?

Jeon Jungkook, su nuevo y querido novio.

Sus padres conocían a los Jeon, y sabían muy bien que Jungkook era un joven dulce, atento y estudioso, tanto así que incluso hasta el señor Jung lo había aceptado como su yerno, teniéndole mucho aprecio a su familia y a él.

Muy apesar de que Jungkook tenía la típica pinta de chico malo; cabello largo, con piercings y tatuajes, sabían bien que el chico era todo lo contrario y aunque aquello fue un detonante para una discusión en su casa de porque Jungkook no era una buena influencia, al final la personalidad del joven fue suficiente para esa riña que su padre, principalmente, había iniciado. También el hecho de que Jungkook era de una familia de bien e incluso estaba en la mejor universidad de Busan.

Dejaron a un lado sus estereotipos y lo aceptaron como su novio.

Sus padres eran muy reservados, e incluso muy religiosos. Tenían la fuerte costumbre de cuidar a sus hijas como si fuese perlas preciosas y el criarlas para complacer a sus maridos. Creencias  conservadoras y mal vistas en los tiempos actuales.

E irónicamente, Jung Joohyun era la oveja negra de la familia, iba a fiestas, se escapaba, se había hecho tatuajes e incluso ya había perdido su virginidad desde la adolescencia, cosa que según sus padres era un pecado mortal.
Claro cada una de aquellas acciones tenían una consecuencia en su hogar, pero ella simplemente aceptaba los castigos sin darle mucha importancia. Sabiendo que sus padres no podrían controlarla, hicieran lo que hicieran.

Claro, Eunbi quiso ser como su hermana, tener esa libertad y esa seguridad que ella poseía. Desde que era una pequeña la admiraba, y cuando ella cumplió quince, Joohyun cumplió sus veinte y se fue de la casa haciendo su vida aparte liberándose de ese mundo reprimido en el que sus padres la querían obligar a vivir.

Eunbi quería lo mismo, por eso, al cumplir sus dieciseis años intento actuar como su hermana hacía, escaparse, ir de fiesta, tatuarse. Mas, nada de eso le había salido bien, sus padres siempre la descubrían y la amenzaban con que a ella sí la enviarían a un convento de monjas, donde la reformarían para que fuese una joven de bien.

Y ella con miedo de perder a sus amigos y su vida como tal, decidió volverse una niña buena, completamente opuesta a su hermana; haciendo las cosas a escondidas y siendo cuidadosa con que su familia no se enterara.

En su casa, era la niñita buena, linda y cariñosa, fuera de ella era una alocada chica que iba a fiestas, se besaba con cualquier chico e incluso llego a consumir ciertas drogas. En una de las fiestas secretas a las que iba, perdió la virginidad con un chico que desconocía y por fin se sintió mujer.

Esas ideas erroneas que sus padres le habían creado, estaban cobrando factura en muchas de sus acciones, haciéndola ser quien era. Estaba perdida en su desesperación y necesida de poder ser ella y no necesitar fingir frente a todos.

Todo eso cambio cuando al cumplir los dieciocho conoció a Jungkook y empezó a salir con él. El chico era tan lindo con ella que no pudo evitar enamorarse de él, sintiendo que era el amor de su vida. Él comprendía lo que sus padres decían, aceptaba aquellas reglas y era prácticamente el hombre perfecto, pues no la juzgaba por eso, ni por sus acciones antes de conocerlo. Nunca le presionaba para hacer nada e incluso le presentó a su hermana mayor para que esta le aconsejara y le ayudará, para que fueran amigas, pues Eunbi se había aislado de todo su alrededor luego de un tiempo en la locura de la adolescencia.