CEO Jeon. [KookTae]

Capítulo 26

TAEHYUNG

La noche del domingo había llegado. Por suerte Jimin y Hoseok se habían ido a un club nocturno, porque no sabría que decir cuando me vieran vestido con ropa de marca, tan elegante y al mismo tiempo informal.

Por otra parte Jungkook aún no me decía nada, respecto a donde íbamos.

Así que después de ducharme, me vestí. Justo ahora estaba poniéndome delineador suave en los ojos, agradeciendo internamente que Jimin sea metrosexual y me haya enseñado a maquillarme en su momento. Pongo hidratante en mis labios y agarro un par de anillos, más un dije plateado que me regaló mi madre cuando tenía dieciocho. Vierto un poco de perfume en mis muñecas, pasándolas por mi cuello y detrás de mi orejas

Realmente me daba un poco de gracia, tener todo un atuendo completamente de negro, y que mi cabello sea rosa con rulitos. Suelto una risa silenciosa. Pero al menos me veía bien. Me sentía a gusto conmigo mismo, cosa que no pasaba desde hace mucho tiempo

El timbre suena.

Sabiendo de quién se trataba, rápidamente guardo mi teléfono en el bolsillo de la gabardina, al mismo tiempo que agarraba los zapatos y caminaba hacia el tataki para ponérmelos

Abro la puerta

Jungkook estaba parado en una pose relajada, vistiendo la ropa que compró ayer, con la única diferencia de que ahora estaba maquillado, sútil apenas visible, su cabello tomado en una coleta alta con algunos mechones cayendo por su frente y una chaqueta de cuero negra cubriendole del frío. Las hebillas del arnés resaltaban en la oscuridad y el delineador hacían sobresalir su mirada

Parecía una chico malo. Un chico malo, rebelde y rockero. Uno moderno.

En sus ojos brillosos centella una emoción inefable y sonríe

-Rizitos... -dice en modo saludo

Salgo del departamento y miro hacia ambos lados de la calle verificando que no haya nadie antes de acunar su cara entre mis manos y robarle un fugaz beso. Beso que Jungkook se encargó de hacerlo largo y profundo

Río silenciosamente cuando me acorraló al mismo tiempo que sus manos acunaban mis glúteos con fuerza cariñosa. Su beso era exigente, como sino tuviera suficiente de mí

-Y-Yah, espera Kookie... -su lengua irrumpió en mi boca callandome mientras que yo intentaba apartarlo por todos los medios. Estábamos en la calle, alguien podría venir en cualquier momento- Jungkook-ah...

-¿Mmh?- emite prácticamente hipnotizado- Me gusta tu perfume

-Vamos Kookie, aquí no- pido apaciblemente acariciando sus brazos. Se separa a regañadientes

-Te ves muy atractivo- dice contemplandome. Río

-Y tú te miras súper guapo. Como siempre- recalco. Sonríe haciendo sobresalir sus dietecitos de conejo

-Vamos...

Nos adentramos al coche y Jungkook hace avanzar el auto cuando nos ponemos el cinturón de seguridad

-¿Aún no me dirás a dónde vamos? La curiosidad me mata- le digo haciendo que suelte una risita nasal

-Ya lo verás rizitos. Sólo ten paciencia...

-¿Ni una pista?- insisto. Mi novio se lo piensa por un momento

-Sólo... No tendrás que finjir- suelta haciendo contacto visual conmigo cuando paramos en un semáforo. Frunzo el ceño

-No tendré que finjir- repito más confundido que nunca- Vale, sigo sin entender nada

Ríe acercando su mano para alborotar mis rizos