CEO Jeon. [KookTae]

Capítulo 34

TAEHYUNG

Mientras peinaba mis rizos enmarañados alrededor de mi rostro y sobre mi cabeza, me contemplé en el espejo de la habitación de Jungkook. Vestía unos pantalones negros de vestir y una camisa color vino desabrochada por los dos primeros botones metida dentro del mismo. Iba a conocer a la familia de mi pareja.

Mis nervios me decían que iba a ser un desastre, pero aún así asistiría porque a Jungkook le hacía mucha ilusión que conociera a sus familiares. Si él estaba conmigo todo estaba bien

-¿Ya estás listo rulitos?- El pelinegro aparece en el espacio del lugar. Meto las manos dentro de los bolsillos de mi pantalón me doy la vuelta sobre mi eje. Le contemplo con admiración

Iba muy guapo como siempre. Tenía unos pantalones negros de pinza, una camisa oscura de raya diplomática y una campera parka de algodón negra, aún abierta que se le ceñía a sus músculosos brazos. Sonrío

-Que lindo estás- dice acercándose para alisar el cuello de mi camisa, también tocando el dije plateado y sencillo que rodeaba mi cuello

-Tu también estás muy guapo- palpo su campera sobre el pecho antes de acariciar sus hombros. Sonríe y la luz de la lámpara hizo brillar y resaltar el piercing de su ceja

-¿Estás nervioso?- asiento y ríe antes de besar mi sien- No deberías estarlo

-Yah, no es tan fácil- murmuro separandome para alcanzar una gabardina negra y ponérmela con lentitud- Pero... De alguna manera me siento seguro cuando sé que estarás conmigo- confieso avergonzado

-Que bueno que lo sabes- dice divertido- ¿No vamos? Seokjin nos espera en el salón

-Sí- ambos bajamos al salón y saludamos a Seokjin quién nos esperaba pacientemente. Agarro la botella de vino que Jungkook compró para la ocasión y después de ponernos los calzados salimos del edificio y entramos al auto

En el trayecto a la casa de sus padres jugué unas cuantas partidas de Seoul knight para disimular y calmar mis nervios. Sin embargo eso no me hacía salir del bucle que había formado en mi cabeza. ¿Y sino le caía bien a su padre? ¿O a su hermano?

Suspiro con resignación y miro por la ventanilla a las calles que pasaban con rapidez, había un poco de tráfico y las avenidas se veían iluminadas y animadas por la víspera de Navidad.

La adrenalina corría hasta el tope de mi cabeza, la corriente de mi cuerpo y el frío del clima hacia que los vellos de mi piel se erizaran. Me sentía muy, demasiado nervioso y ansioso

Siento la mano de Jungkook posarse encima de la mía. Giro mi cabeza hasta su rostro descubriendo su semblante relajado y pacífico. Niega suavemente con la cabeza

-No lo pienses demasiado- susurra- Te adoraran rulitos. Confía en mí- besa mis nudillos con cariño y le sonrío

-Confío en tí- le digo seguro y apoyo mi cabeza en su hombro

Son casi las ocho y media cuando el auto dobla una calle hacia el área donde las casas valen más que nada. Seokjin con el rostro impasible fijo a la calle, aparca el coche frente a un hogar medianamente grande pero muy moderno. El jardín que lo rodeaba estaba lleno de lirios y rosas muy bonitas. Impresionante

-Hemos llegado señor- Seokjin baja del auto y nos abre las puertas

-Gracias- susurro cuando Jungkook se pone a mi lado

-¿Estás listo?- me pregunta y asiento

Jungkook se adelanta caminando por el camino agrietado hasta la puerta de la casa y cuando me quedé sólo con Seokjin le miro