CEO Jeon. [KookTae]

Capítulo 61

JUNGKOOK

Miro mis manos entrelazadas con expresión neutra mientras esperaba pacientemente. Me recuesto en la silla y subo la cabeza para consultar todo mi entorno.

Los policías. Los cristales y varios familiares hablando con algunos reos al otro lado del vidrio. El lugar tenía un fuerte olor a pólvora y a metal pulido.

Peino mi cabello hacia atrás cuando Min Yoongi aparece detrás de una puerta con un policía escoltandolo. Vestido con el uniforme azul y esposado de sus dos muñecas. Su mirada se mostró sorprendida cuando me observó.

El policía le quitó las esposas y el hombre se sentó al otro lado del vidrio.

Al principio no hacíamos nada más que mirarnos fijamente. En su mirada felina había un ápice de confusión y desconcierto. Así que sin preámbulos, alcancé el teléfono colgado a mí lado y el contrario, titubeante, copió mi acción

-¿Jeon?- fué el primero en hablar. Suspiré

-El mismo- contesto- ¿Te sorprendes por mi visita?

A Yoongi le habían condenado cinco años de prisión. En su defensa, el había sido obligado, sin embargo no dijo nada y sigue siendo un cómplice de asesinato y abusó de su profesión para engañar y manipular.

Sí, lo hizo mal. Pero a diferencia de Namjoon y Jeongguk, sí se arrepentía. Lo veía en su mirada. Podía notar su cargo de conciencia. No obstante, engañó a Taehyung y desde un principio nunca fué sincero. Eso no tiene justificación.

-¿Qué haces aquí?- apretó sus labios y pestañeó un par de veces- ¿V-Vienes a burlarte?

Aprieto la mandíbula

-No soy ese tipo de persona- replico algo indignado por su comentario- Iré al punto entonces

-Por favor...

-¿Por qué?- le suelto casi con brusquedad

Yoongi se sobresaltó en su lugar, para nada esperandose esa pregunta. Lo tomé con la guardia baja

¿Por qué nos engañaste? No. ¿Por qué engañaste a Taehyung? Él te apreciaba, confiaba en tí plenamente. Lo traicionaste

Yoongi puso su mano libre sobre su frente. Una pose que demostraba vergüenza y conflicto mental

-Yo... Nunca fué mi intención dañar a Taehyung ¿sabes?- aclara y me mira a los ojos- Le tengo aprecio a ese niño y en varias ocasiones tuve el impulso de decirle la verdad

-¿Y por qué no lo hiciste?

El hombre se remueve incómodo en su silla antes empezar a comerse las cutículas de sus uñas. Frunzo el ceño prestandole más atención a sus dedos

Sus uñas se veían maltratadas, masticadas, y algunos de sus dedos estaban cubiertos con tiritas. Yoongi al ver que miraba fijo sus dedos dejó de comerse y los escondió rápidamente debajo de la mesa

¿Aliviaba su ansiedad comiéndose las uñas?

En parte lo entendía. Cuando estudiaba en la universidad nacional de Seúl, tenía el mal hábito comerme los labios, al punto de hacerlos sangrar.

-No estoy seguro ¿de acuerdo?- suspira haciendo una pausa- Quizás no lo hice por miedo, o por la memoria de Iksoo...

-¿Acaso ese hombre tiene memoria?- le interrumpo con rabia sin poder evitarlo. Aprieto el teléfono- Ese hombre dejó más daño que otra cosa en este mundo. ¿Sabes lo mucho que sufrí por él? ¿Sabes el trauma que me dejó? ¡¿Lo sabes?!