Perfecto ~Alastor × Lucifer~ (Primera Temporada)

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Narra Argía

Okey, llevo 2 rounds ganados de los 5 que eh hecho con Gabriel, no es mucho pero puedo mejorar mucho más y hay una cosa que me motiva, el saber defenderme de quien se quiera sobrepasar conmigo.

-¿Es todo lo que tienes Argía? ¡Vamos se que tienes mucho más! -me intento dar un derechazo que esquive y lo tiré al suelo estirando una de mis piernas- oh vamos eso no me detendrá Argía -le sonreí y me puse arriba de el- ¿Eh? -se puso nervioso, enrede mis brazos atrás de su cuello- Argía yo no entien- -le metí un cabezazo y cayó al suelo desmayado-

-¡Ay no, Gabriel! -tome una hoja y le eche aire para intentar despertarlo- no puedo explicar el cuánto me arrepiento por hacer esto Gabriel -vi algo preocupado a Gabriel, no pensé que esto pasaría, ahora me siento mal por haber hecho esto.

-¿Que pasaría si le digo que hiciste esto a mi padre? -samael habló atrás de mi, no quiero que diga nada a ese horrible hombre-

-Haz lo que sea -aun veía preocupado a Gabriel- igual, si Gabriel se entera que dijiste algo saldrías más perjudicado.

-Callate Argía, iré a ensayar los votos de mi boda -esto si que fue una sorpresa enorme- tal vez te preguntes con quién, bueno Liz.

-Me alegro y todo pero ¿al menos me puedes ayudar a llevar a tu hermano a su cuarto? -me daba igual la noticia, aunque más que nada era molestia de que yo no pregunte nada.

-No puedo, debes encargarte tu solo y la boda es en 2 semanas, justo en mi cumpleaños -que gran emoción- y se hará una fiesta solo para chicos una semana antes de la boda, estás invitado por parte de mi padre -se acercó a mi y susurro en mi oreja- ahora comportate como mi sirviente, padre mal piensa todo esto y créeme no quiero una golpiza por tu culpa o estás muerto venado.

-Claro -sone firme pero tenía miedo- deberías correr a menos que quieras que tú boda sea mala -rapidamente se fue y yo cargue como pude a Gabriel, pesaba demasiado.

Me senté a esperar a que Gabriel despertara mientras también veía la ventana, ver a los animales ahí me hacían sentir paz y a la vez tenía ganas de ir a matarlos, si son pensamientos bastantes raros, ¿Que puedo decir? Tampoco se por que tengo esos pensamientos tan oscuros.

Mi mente se nubla veo todo de un color negro, y me empiezo a preocupar, siento un dolor terrible pero no puedo gritar, es como si me taparan la boca. Cuando por fin dejo de saber que pasa a mi alrededor.

Narra Samael

-¿¡Cuántas veces debo decirte que así no se toma la mano!? -me dio un golpe en mi brazo descubierto con un palo- ¡Quieres casarte con ella pero aún así eres tan inútil tan solo para decir bien las palabras! -recibí otro tras otro, las lágrimas me salían y mi brazo sangraba.

-Querido debes parar -dijo mi madre y tomó por atrás a mi padre para alejarlo de mí- por favor

-¡Vas a aprenderte todas las palabras antes de casarte o verás como es que te irá peor Samael! -vi a un lado de la ventana y había una botella de alcohol- ¿¡Me oíste!?

-¡Ya entendí padre! -tome mi brazo con mi mano y lo vi con los ojos llenos de lágrimas y furiosos- prácticare todos los días hasta decirlo bien.

-Vamonos -jalo a mi padre a afuera de la habitación.

-Eres una vergüenza Samael, ojalá no hubieras nacido -de todo lo que dijo es lo que menos me dolió, siempre me han necesitado.

Oí la puerta cerrarse y empecé a llorar más pero en voz baja, en serio odio que me vean llorar, después de todo los hombres no lloran y menos por esto, debo ser perfecto.

-Debo ir a darme un baño -susurre con algo de dolor y camine a mi cuarto a por el baño, suspire y me metí al agua, era una horrible la escena donde la sangre invadía toda la bañera, claro que me quería casar con Liz, era la mujer de mis sueños -¿Por qué?

Esa palabra resonó por mi cabeza, ¿Por qué? ¿Por qué me tratan así? Soy tal y como ellos quieren, y hago siempre lo que ellos quieren, estoy confundido y bastante desesperado.

Terminé de bañarme y me puse de nuevo el traje, después de todo aún es de día, diría yo que las 2 de la tarde. Ya se, molestare a Argía.

Caminé a él cuarto de Gabriel y solo visualice a Gabriel recostado, tal vez y solo tal vez se pasó con el cabezazo Argía, será genial ver cómo mi padre lo regaña y las con esa cara de idiota que trae siempre.

-Hey Gabriel, despierta -lo moví y abrió los ojos- ¿Sabes dónde está Argía?

-No lo sé, deberías buscarlo -lo mire confundido- posiblemente esté abajo o atrás del jardín, no lo sé realmente.

-Bueno, gracias -me cubrí más el brazo que aún sangraba y fui abajo a buscarlo.

...No, ¿No está? ¿Se habrá ido? Si es así demonios, me quedé sin juguete alguno, solo esto me puede pasar a mi.

-Samael -dijo mi madre- debo decirte que la fiesta se hará mañana a las 6 de la tarde, así lo dijo y decidió tu padre.

-Gracias mamá -suspire- quiero estar solo, ¿Puedes irte? -no la escuché, es una señal de que ya se fue- eso es genial, vendrán varios de mis amigos también, y gente del pueblo que vive algo bien por lo menos y se supone que Argía pero el no está aquí -dije triste pero al momento levanté la cabeza- aunque no es alguien importante, solo un pueblerino más del montón, esa es la verdad.

Narra Argía.

-Eres un monstruo, abre los ojos Argía -repetia esa misma voz de la otra vez- ¿Oh eres una clase de ciego Argía?

-Solo quiero que me dejes -todo estaba oscuro- no soporto que sigas así, no me gusta.

-Justo ahora le estás haciendo daño a alguien ¿Que puedes pensar de eso? ¿Que le gusta? Eres un egocéntrico, solo piensas en ti.

Me quedé en silencio, era en realidad en cierta parte cierto lo de egocéntrico, no se que responder no se si son mentiras o la realidad.

Alguien por favor ayúdeme de esto.

Fin del capitulo

Debo decir que me inspire un poco en metal family

Chao