꒰ O38 ꒱

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something between you and me

Sus palabras era un recuerdo que deseaba olvidar de alguna forma. Mientras organizaba sus cosas, esperando a que todo sea dejado atrás, simplemente podía ver a lo lejos otra razón. No sabía si era lo indicado, si era lo que debía hacer o si simplemente estaba escapando de sus problemas.

Solo, se sentía agobiada en aquel espacio, queriendo escapar de una vez por todas.

— ¿Qué crees que estás haciendo? — le preguntó ella alzando su ceja mientras la observaba directamente.

Mordió su labio y no pudo verla, no compartió miradas, al contrario, solo la evadió y evadió su pregunta.

Para qué iba a responder algo obvio.

Lo que no sabía es que ella la tomaría de su brazo para que dejara de doblar su ropa, o planificar algo que todavía no era momento de hacer.

— De verdad, eres increíble Roseanne Park — dijo acercándola.

Otra vez lo hizo, se calló, porque no estaba dispuesta a responder a nada de lo que ella quería conseguir. Se sentía ansiosa, ya tenía su fecha de partida nada más que- nada más que se sentía vacía.

— Ya, suéltame — se salió irritada — Estoy organizando, ¿Crees que estoy jugando?

Lisa solo rodó sus ojos y se separó, solo quería molestarla un poco y también hacerle saber que nada de lo que estaba haciendo la iba hacer sentir bien. Pero ella lo sabía sola, sus ojos eran la clara demostración de que no estaba sintiéndose bien.

Escapando de nuevo, era lo único que sabía hacer.

Simplemente la observó, y luego observó al fondo de su habitación. Una imagen de ambos abrazados mientras se divertían, habían sacado las fotos una vez que fueron a un karaoke.

Sí, lo recordaba como si fuera ayer.

Como si la amistad de ambos siguiera intacta, sin haberse desplomado por completo. Por su culpa, lo sabía, todo era su culpa.

Simplemente le quedaba recordar.

Aquel día donde su madre le había vuelto a llamar de nuevo, enojada, molesta, reclamando qué clase de hija era la que tenía. Sí, otra vez, no podía dejarla en paz ni en su nuevo lugar.

O, mejor dicho, su nueva cárcel.

Ella le dictó de nuevo lo que debía hacer para poder regresar y sabía que no tenía otra opción más que obedecer; se sentía helado, estar afuera sola era helado. A pesar de que hubiera una gran fiesta adentro de ese hogar, ni siquiera quería entrar porque ya estaba decaída.

No estaba disfrutando nada, ni su estadía allí, ni las cosas que estaba conociendo. Su mente solo podía enfocarse en una cosa o, mejor dicho, en una persona.

El solo pensamiento de no poder contactarse con ella la estaba matando, quería irse y tomar el primer avión que pudiera. Escapar, eso era lo que quería, encontrarla y escapar.

Solo que ese pensamiento era para gente muy valiente y ella no creía estar preparada para afrontar tanto.

"No puedes dejarlo todo por amor"

Lo sabía.

Pero tan solo quisiera poder hacerlo.

Dejó que sus pies tocaran la grama sin miedo, la noche era helada y aun así estaba tan tranquila allí sola sentada, cuestionando cada parte de su vida que no quería ver. Preocupada, muy preocupada y temerosa. Tan solo tenía que olvidar, olvidarlo todo y seguir adelante.

el novio de Kook² | taekookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora