꒰ O42 ꒱

307 41 8
                                    

jungkook's apple

Su mente parecía un revoltijo de ideas desde que salió de la casa de su madre, ideas que trataba de ignorar porque solo agregaban confusión y nerviosismo.

Mientras manejaba no podía dejar de pensar en la muy inesperada pregunta que le llegó de parte de su madre. El matrimonio, tal vez ya había pisado la edad en que aquella pregunta era más recurrente entre las personas, pero de igual forma era una sorpresa para él.

No había pensado en eso con Jungkook porque incluso a pesar de que llevan años siendo pareja ni siquiera han sido tan formales como para vivir juntos (y entiende las razones del por qué) pero no lograba verse en ese estado por el rumbo que tenían.

A pesar de qué la imagen mental no fuera algo de lo que se sintiera incómodo, al contrario, el solo hecho de ver a JungKook vestido de blanco caminando hacia al altar era un deleite y saber que era suyo por el resto de su vida era la cereza del pastel. No figuraba eso completamente sabiendo que si lo hiciera ahora no podría disfrutar de su pareja.

Por más que se había negado a aceptarlo gran parte de su relación se basaba en ajustarse a Nayeon y Somi, cosa que no le disgustaba por completo pero ahora lo pensaba y se sentía atascado.

Atascado en una burbuja que no sabía cuándo iba a salir. Su relación con JungKook aún la sentía en esos niveles que cuando un chico tenía que pedir permiso para salir con el otro, los padres de por medio, las horas limitadas.

Solo que ahora ya no pide dinero ni explicaciones.

Pero aún así se sentía tan varado que le costaba imaginarse un avance más allá de vivir juntos.

¿Y eso cuando pasará? ¿Cuando tenga como 40?

Solo pudo apoyarse frustrado sobre el volante pensando en cómo serían las cosas entre los dos si Nayeon y Somi no estuvieran. O mejor dicho si si novio no tuviera que cargar con ellas como si fuera un padre.

Tal vez ahora las cosas serían diferentes.

¿O no?

No sabía qué pensar.

Revisó su teléfono para ver si tenía algún mensaje de JungKook. La distancia o volver a pisar la distancia lo hacía impaciente, ahora que había descubierto la soledad se sentía terrible y su mano ya no soportaba eso.

Pensaba que de alguna forma algún mensaje lindo lo iba a animar, porque ahora mismo se estaba confundiendo y mucho. Cuando vio la pantalla no pudo encontrar nada de parte de JungKook, pero si llamadas de Jimin y de su primo Hoseok cómo si hubiera alguna emergencia.

No supo cuál de las dos corresponder, pero otra llamada quitó las decisión.

Era Hoseok.

Ni quería contestar.

"¡Dios! por fin que contestas estúpido" dijo este con un tono alterado.

— ¿Qué está pasando? ¿Por qué me llamas tan apurado? — preguntó mientras seguía manejando rumbo al hotel.

Un silencio aguardó la llamada respecto a aquella pregunta, simplemente trató de pensar en que no era algo grave y que solo eran puras exageraciones por parte de su primo.

el novio de Kook² | taekookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora