💙Rowick🔪 3/4

396 37 0
                                    

John logro acercase a Steve, ahora eran muy unidos. Ganó mucho en esas cuatro semanas que llevaba ahí. Su plan seguía en pie, solo tenía que encontrar la manera de convencer al rubio de irse juntos. Este mundo era muy peligroso, no mucho menos que el suyo pero al menos ahí no tenía que enfrentar seres de otro mundo y no tendría que correr el riesgo de morir. No soportaría perderlo, ya ha perdido muchas cosas importantes no quisiera hacerlo de nuevo.

Mientras, Steve estaba muy ilusionado. Quedó completamente prendado de John. Lo quería, se enamoro eso era seguro, cada qué hablaban o tenían el mínimo roce, mariposas revoloteaban en su estómago parecía un adolescente. Aquella noche cuando lo beso en la mejilla no pudo dormir, lo evito tres días seguidos porque le carcomía la vergüenza, pero el pelinegro hablo con el aclarándole que no pasaba nada, que todo estaba bien.

Pero últimamente muchas preguntas e inseguridades asedian su cabeza. ¿Y sí, el no le gustaba?¿y si lo rechazaba cuando le contará sobre sus sentimientos?¿que pasaría cuando se vaya? no quería perderlo, perdió el amor una vez no quería hacerlo de nuevo.

Así qué tomo la decisión de decirle todo. No importa si lo rechaza al menos podría vivir con la tranquilidad de que John se vaya sabiendo que le gustó. Hablaría con él esta noche.

Con Tony era otra historia, por supuesto noto la gran cercanía que tenían y eso lo ponía muy mal. Últimamente estaba de mal humor. Los tres días que el rubio no le dirigió palabra al pelinegro él aprovecho y se acerco con excusas tontas.

Ese hombre lo ponía al mil. Esos tres míseros días se hizo la estúpida idea de que logro algo con Wick, ay que tonto. Al tercer día lo encontró hablando con el Capitán. Se puso rojo de los celos. A ese fósil no le basto con no prestarle atención ahora también quería quitarle lo que era suyo. Él también podía jugar ese juego.

Sus esfuerzos dieron en vano ya qué la atención del otro solo se dirigía a Steve, solo a él. Pero no se rendiría, era un genio, sexy y ex playboy, tarde o temprano caería ante sus pies, así como algunos solían hacerlo.

Natasha notaba cierta tensión cuando esos tres chocaban. Ya estaba más que clara que su Capitán y el sastre tenían un futuro no muy lejano pero, cuando Anthony se encontraba con los dos platicando hacia cualquier cosa para interrumpir así que, más o menos ya sabía para donde iba todo.

En la noche John y Steve se reunieron en la terraza de la torre. El primero lo invito a cenar como “amigos” el último acepto gustoso ya qué le parecía una buena oportunidad. Arriba ya estaban comiendo y hablando de lo que sea.

—Tony me dijo que la máquina estaba lista, ya puedo regresar a mi hogar.

En ese momento Steve sintió el tiempo detenerse, lo que oía lo escuchaba lejano. Un nudo en su estómago se formó. Unas ganas de llorar se apoderaron de él.

—¿C–Cuando te vas entonces?—logro articular. Permanecía con la cabeza baja evitando que viera la tristeza en sus ojos.

—Mañana.

Eso fue como un balde de agua fría. Suspiro tratando de calmarse y lo miro.

—¿Estás bien?—pregunto viendo al rubio.

—N–Necesito decirte... algo—tartamudeo.

—Habla—dejo los cubiertos en la mesa y atento lo miro.

—Te sonará raro, pero necesito decírtelo porque esto me está matando y no importa como me veas después—a medida que hablaba el de ojos marrones apretaba el mantel de la mesa impaciente. Suspiro otra vez y lo soltó sin más.—tú me gustas John Wick, y me gustas mucho.

Un silencio vino luego. Steve esperaba la reacción del otro, sentía que se iba a quedar sin aire.

Por dentro se sentía estallar de emoción, salió mejor de lo que esperaba. Se levantó de su asiento y se arrodilló frente al Capitán de los vengadores.

—Tú también me gustas Steve Rogers.

Y el aire volvió. El peso que antes sentía se fue. Por un simple impulsó de emoción bajo un poco la cabeza y beso los labios que tanto había soñado.

John correspondió al instante levantándose sin romper el beso. Profundizo el contacto y se separaron por falta de aire. Quedó maravillado, el pecho del rubio subía y bajaba, sus labios rojos e hinchados y sus ojos tenían un brillo que nunca había visto antes, solo en la fría hoja de un cuchillo. Steve rojo hasta las orejas se tocó los labios y rió.

—Creo que estoy soñando.

—No, no es un sueño—rió por la incredulidad del más alto.

De pronto vio como el ánimo del rubio disminuía. Extrañado pregunto.

—¿Que pasa cielo?

—Tú te tienes que ir, ¿que va pasar ahora?¿que va pasar conmigo?—hizo un mohín.

—Lo pensé y vendrás conmigo—soltó decidido.

—Pero... pero yo no puedo irme, no puedo dejar a mi equipo, a mis amigos ha Shield. No puedo alejarme y dejar este mundo desprotegido—una lágrima resbaló por su mejilla. Si quería ir con él pero habían otras prioridades, prometió siempre cuidar a su nación, era el Capitán América.

—A sido poco lo que he estado aquí pero, me he dado cuenta de que aquí hay muchas personas que pueden cuidar este lugar. Personas fuertes, a ti ya no te necesitan pero yo si, no puedo irme sin ti Steve. De dónde vengo también hay peligro allí también necesitan a un héroe, si vienes conmigo podrás ayudarme allá, podemos hacer una vida juntos sin esto, por fin podrás estar tranquilo, por favor Steve ven.

Lo pensó, un largo rato. Tenía responsabilidades antes su sueño era proteger al mundo, a las personas. Pero ahora, ahora tenía otro sueño, nunca tuvo una vida de verdad entre guerras y peleas que no eran suyas, ahora tenía la oportunidad de hacer una de verdad. No lo pensó más, no le quedaron más dudas.

—Aceptó. Iré contigo. Ellos ya no me necesitan, quiero una vida a tu lado.

Nunca había sonreído como lo hacía ahora. Si, si, ¡sí!. No le a contado sobre su verdadera identidad pero después se preocuparía por eso.

Beso a Steve con cariño, con amor.

—Me haces muy feliz.

—Tu también.

Repartió besos por todo su rostro provocándole cosquillas por su barba.

•••

—No, no, no... ¡maldita sea!—golpeó la mesa furioso. Estuvo observando todo el tiempo, sabía sobre su cena y no dudo en espiarlos. Si John no era para él no sería de Steve tampoco. No dejaría que se lo llevará eso jamás.—eso nunca. ¡Jarvis!

—¿Señor Stark?

—Llama a Fury, dile que es urgente, que están planeando secuestrar al Capitán.

—Como usted diga.

Una sonrisa algo maquiavélica se dibujo en su rostro, se echó un poco hacia atrás en su asiento y miro al techo.

—No voy a permitir que te vayas, no voy a permitir que seas feliz. Nunca me quisiste, no soportaré tal humillación, no, soy Tony Stark alias Ironman, el genio, millonario, ex-playboy y filántropo, todos caen rendidos a mi... todos.

✨AllxSteve✨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora