Epílogo

121 13 10
                                    

Antes que nada muchísimas gracias por leer mi historia, comentar y ayudarme a seguirla! No ha sido famosísima ni ha tenido mucho éxito pero creo que os ha gustado y eso es lo que importa :)

Me ha servido de "ensayo", ahora creo que escribo mejor y eso.

Bueno... aquí os lo dejo!
---------------------------------------------------------------------------------

Dos años después.

He aprendido, por fin, a vivir sin él. A pesar de que Marta me ayudó, no era suficiente. Me costó. Supongo que es natural. Siempre le voy a querer. No quiero que eso cambie.

Ahora, a mis diecisiete años, soy feliz. Por mí, por él, por todos.

Creo que él más que nadie se merece mi felicidad.

Creo que él, que tanto me dio en vida, que tantos besos, tantas caricias, tantos detalles, tantas sonrisas, se merece que yo viva la vida.

Sigo llevando la P en mi cuello y nunca me la quitaré. Es mi amuleto, me recuerda que día a día debo luchar por lo que quiero, lo que creo y lo que soy.

Estos dos años he luchado sola, pero en el fondo sé que él siempre me está ayudando. Esté donde esté.

Nunca le voy a olvidar. No quiero olvidarle.

Porque él nunca me olvidaría, y lo sé.

He aprendido también, que estar con otro chico no es traicionar a Pablo. En realidad, yo nunca lo vi así. Nunca vi en Pablo alguien que se enfadaría si yo estuviese con otro chico sin que estuviésemos juntos. Creo que lo nuestro era de ese tipo de amor que, si el otro es feliz, aunque no sea contigo, te basta. Así lo veo yo.

Actualmente no estoy con nadie, he conocido a algunos chicos pero ninguno me ha hecho sentir nada lo suficientemente fuerte como para dar el paso de estar en una relación seria de verdad.

Así es; no estoy con nadie no porque lo vea como una traición a él. No, ni mucho menos. Simplemente no me apetece. No es el momento.

Sé que algún día llegará y estoy abierta a eso. Me enamoraré algún día, formaré una familia.

Es lo que quiero y lo que siempre he querido. Y a pesar de todo, siempre lo voy a recordar.

Sigo visitándole. Siempre le llevo unas margaritas. Aquel día, en ese parque repleto de flores, la mayor parte eran margaritas. Él sabía que me gustaban.

De alguna manera siento que estoy feliz, completa. Tengo lo que quiero.

Supongo que querréis saber qué pasa con los demás, qué pasa con mis queridos Marta y Raúl. Con ellos, que son como mis hermanos. Con ellos, que tanto me han ayudado en este tiempo, que tanto me han apoyado y a los que tanto quiero.

Bien, pues allá voy.

Seguimos siendo los mismos de antes. Con nuestras tonterías y nuestras salidas.

Ellos dos siguen juntos. Los veo felices, enamorados. De alguna manera, me recuerdan a Pablo y a mí. Eso no me entristece, al contrario; me alegra ver que son felices, y están bien. Se lo merecen.

Se merecían su final feliz.

Se aportan muchísimo mutuamente. Eso es lo mejor que puede haber en una pareja.

Bueno, todos nos merecíamos un final feliz, en realidad. Por desgracia la vida no es eso. Hay que aprender a vivir con las desgracias, y los accidentes, y por eso hay que vivir, aprender… Ser feliz. Siempre.

Y… Bueno, eso es todo. Quería aclararos, que estoy bien, que soy feliz y que todo esto me ha hecho más fuerte.

Me gustaría decirte ahora algo a ti, Pablo. Supongo que no lo podrás leer. Pero igualmente necesito decírtelo. Sólo una palabra importante, en realidad.

Gracias.

Gracias, por todo. Por hacerme tan feliz. En vida, y ahora. Soy lo que soy en parte gracias a ti. Siempre te voy a agradecer eso y siempre, siempre te voy a querer. Siempre recordaré aquellas miradas antes de estar juntos que ambos, cada uno por nuestro lado, interpretábamos mal, creyendo que no le gustábamos al otro. Siempre recordaré aquel primer beso en esa clase. Siempre recordaré esa carta. De hecho, aún la tengo. Siempre la guardaré. En resumen… Siempre te voy a recordar. Una vez más… gracias. Por enseñarme tanto. Por amarme tanto. Por darme la oportunidad de amarte a ti. Eres parte de mí, siempre en mi corazón.

P+N.

Fin.

Simplemente amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora