Capítulo 16

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Narra Nerea.

Después de los fuegos artificiales y de la declaración de Pablo, vamos a un local.

Este está vacío y en penumbra, así que le digo a Pablo:

-Vamos a otro sitio, está vacío.

Y de pronto, muchas siluetas se levantan a la vez que un grito a coro resuena en el lugar.

-¡¡¡¡FELICES 15, NEREA!!!!

No lo puedo creer. ¡Una fiesta! ¡Seguro que ha sido cosa de Pablo!

Lo miro tiernamente.

Enseguida, veo a Marta y a Raúl, que se acercan juntos (¡qué parejaza hacen!) a darme un graaaaaaaan abrazo.

-¡¡¡Los regalos!!!! –grita Marta.

Yo me sonrojo, porque no quería regalos.

Pero lo tenía que haber sabido. Si Marta estaba implicada, seguro que habría regalos…

-Toma. Marta y yo creímos que te gustaría –me dice Raúl extendiéndome un paquete.

Lo abro, y cuando lo veo, alucino. Es simplemente precioso.

-Nos ha costado recopilar las fotos… Pero ha merecido la pena –dice Marta emocionada.

Es un álbum de fotos de los tres, desde pequeños, hasta la foto más reciente, con muchas dedicatorias. Me encanta.

-Muchísimas gracias, de verdad. Es precioso –digo con la voz quebrada por la emoción.

Luego, los demás me dan sus regalos, que también me gustan mucho.

Hay discos, libros (¡¡bien!!), ropa, chuches… Estoy muy feliz.

-Gracias a todos –digo sonriendo.

Todos se acercan y me dan un gran abrazo, dejándome sin aire.

-Esto… es… muy… bonito… Pe… ro… necesito… aire…

Todos ríen y se apartan. Dios, por fin puedo respirar.

De pronto, veo a Pablo acercándose a mí con un pequeño paquete.

-Dime que no es para mí –le digo.

-Mentiría –dice con su característica sonrisa de lado.

-Ya me has hecho un regalo. Los fuegos. Además… tú me haces un regalo cada vez que sonríes –le digo.

Simplemente amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora