Parte 16

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XU MINGHAO:

-Han sido siete días, Yan an, una jodida semana – le reclamo mirando el plano de la casa – ¿Qué más quieres que espere? Tengo los hombres, tengo el plano, tengo el plan de rescate, ¿Qué quieres que espere?

-Tú... ¿Por qué tienes que ir tú? Quítate del plan y deja que los hombres lo traigan aquí.

Yan an insiste e insiste en que no vaya al rescate de Jun, que los hombres pueden solos. Pero quiero ir yo, quiero matar a quien me lo arrebató con mis propias manos.

Sé el poder que el padre de Jun maneja, lo he estado vigilando en mi forma de cuervo, y estoy listo para atacar cuando tenga la oportunidad. Recuperar lo que es mío por derecho. Ciertamente, también me siento culpable, y enojado. Culpable porque si no hubiera peleado con Jun, no estaría pasando esto. Y enojado porque aun cuando Jun decía que confiara en todo lo que es, el poder que tiene, o incluso cuando me mostró que sabía usarlo... Se encuentra atrapado en una vieja casa llena de recuerdos dolorosos para él.

-Basta – interrumpo las razones que no estaba escuchando – Lo haré, si no quieres acompañarme, entonces quédate aquí y espera a que vuelva.

-Estas cometiendo un error, Minghao – toma su celular del escritorio y camina hasta la puerta – Tienes más enemigos de los que crees.

Luego de que sale, me cuesta reaccionar. ¿Más enemigos de los que creo? Soy el jodido líder de una mafia nada sutil, ¡Claro que tengo enemigos! Una risa se escapa, de total burla ante las palabras de Yan an. Parecía más listo cuando trabajaba con mi hermano. Un ajuste de cuentas que salió mal y se le pudrió el cerebro.

Mingming y Yan an fueron novios los últimos tres años de la ida de mi hermano, y fueron amigos desde uno o dos años antes de eso. La familia de Yan an trabajaba para papá antes, cuando era un simple idiota vendiendo drogas, antes de que mi hermano y yo agrandáramos el negocio. Al parecer, cuando maté a papá algo paso en la familia de Yan an, donde tuvo que elegir entre su familia y mi hermano. Dramáticamente eligió a mi hermano.

Yan an estuvo ahí cuando murió mi hermano. Y yo no. Por eso lo mantengo cerca, es como si una parte de él estuviera conmigo, como si lo único que me quedaba aún estuviera aquí. Y cuando creí perder las esperanzas conocí a Junhui.

Quizá si Mingming hubiese sido el que quedó con vida las cosas serían diferentes. Me corrijo, las cosas serían muy diferentes, él me habría ayudado, él sería el dueño de todo esto por ser el mayor y él más capacitado, él habría hecho que todo fuera mejor. Tal vez se habría llevado bien con Jun. Tal vez lo hubiera odiado. Quizá era su tipo. Tal vez... no hubiera conocido a Jun.

Y ese pensamiento me tiro al fondo otra vez. Cayendo y cayendo en la oscuridad otra vez. Porque cuando creí encontrar la luz otra vez alguien se interpuso otra vez, porque se esfumó de un momento a otro como la cordura que creí estar ganando. Porque Jun me estaba sanando sin notarlo... Y ahora puede que nunca vuelva a verlo.

Te necesito, Jun.

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WEN JUNHUI:

"Lo siento, mamá. Te amo" – Fue como debí despedirme de todos, pero sólo lo hice de ella.

"Confía en que sé lo hago, papá" – Fue lo que dije antes de subirme a la motocicleta y dejarlos atrás.

"Volveré pronto, Sam" – Fue la última mentira que le dije a mi hermano, mientras él lloraba.

"Sí, señor" – Eso fue lo último que Hao escucho de mí.

Borderline ~JunHao~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora