REDENCIÓN

¿CELOS?

REI

La albina no recordaba la ultima vez que habia tenido relaciones con su esposo, tenia claro que despues del nacimiento de Shoto, Enji no la habia vuelto a tomar de manera frecuente, las noches solo eran para domir, a veces para llorar por los golpes dados, en otras la cama se encontraba fría ya que el pelirojo estaba en sus rondas nocturnas pero muy rara vez tenían relaciones y cuando las tenían eran breves, Enji no se preocupaba por satisfacerla a ella, solo queria llegar a su propio clímax y eso era todo

Despues de ser internada, la albina no volvió a sentir los labios ni el cuerpo de otro hombre, seria tonta si no admitiera que algunas noches extraño estar con su esposo pero al pensar en el daño que ella habia ocasionado a su hijo... Prefería la cama fría a volver a estar con el pelirojo o al menos asi lo sentia hasta hace poco. Sentir la erección de su esposo mas que algo sexual fue una revelación, él estaba cambiando tanto que hasta se excitaba solo por verla a ella aunque...¿quien le aseguraba que no estaba pensando en alguien mas?, habían pasado muchos años y seguramente él habia conseguido algunas mujeres para calmar sus problemas sexuales

-Rei

Se estremeció al escuchar su nombre que en labios de su esposo sonaba como si fuese un regaño. El pelirojo la observaba de manera penetrante mientras sostenía con fuerza el volante y esperaban a que el semáforo cambiara de color

-¿Que sucede?- Preguntó ella con una sonrisa tranquila

-¿Estas segura que quieres hacer esto?

-¿Esto?- Interrogó confundida y los ojos turquesa volvieron a enfocarse en el camino mientras el auto avanzaba hacia el centro comercial

-Pasar el día conmigo

Ciertamente no sabia si estaba haciendo lo correcto pero tenia la extraña necesidad de pasara tiempo con su esposo, queria saber mas de él, queria volver a empezar, darse a ella, a él y a sus hijos la familia que no pudieron ser y que muy posiblemente nunca serán

-Por supuesto- Respondió viendo por la ventana lo mucho que habia cambiado la ciudad

-Tu...¿que tal va la recuperación?

Rei se giro y vio a su esposo morderse con cierta fuerza el labio inferior, conociéndolo bien, sabia descifrar que esa era su manera de castigarse por decir algo que no queria decir. Ella solo mantuvo su vista un momento mas en ese rostro maduro, severo y ahora marcado pero que no perdía el atractivo que tuvo en su juventud

-Bien, dicen que pronto podre salir de alli

-Me alegra oír eso- Dijo y en su tono se pudo percibir lo nervioso que estaba poniéndose. -Dime, ¿quienes son los doctores que están a cargo de tu recuperación?

Al oír aquella pregunta la albina no pudo resistir soltar una ligera risa que confundió al pelirojo quien acababa de estacionarse frente al centro comercial. Él apago el auto y se giro para ver a su esposa quien aun trataba de no reír

-En...Enji...Gojo solo es un amigo- Dijo ella entre risas y el heroe se cruzo de brazos para luego enfocar su atención en otra parte

-Ese chiquillo te pretende...eso me enferma- Confesó y Rei no podía creer que estaba viendo a su esposo nervioso y sonrojado ante un tema como este

-No lo se pero yo solo lo veo como un amigo...después de todo, estoy casada- Agregó y esto pareció calmar al pelirojo quien no tardo en bajar del auto para luego rodearlo y abrir la puerta del copiloto

-Te ayudo- Soltó tan de repente que Rei se quedo estática por unos segundos, no se esperaba eso y menos que su esposo le ofreciera la mano para ayudarla a salir. -¿Sucede algo?