Fiebre del bebé por Hanagaki Takemichi

5.8K 778 144
                                    

—¿Por qué está esta criatura aquí?

Takemichi miró de lejos al pequeño que jugaba bastante fuerte con un sonajero en el sofá. El adolescente puso cara de disgusto al ver la saliva que goteaba por la barbilla del bebé antes de volver a centrarse en Takuya, agachado junto a la silla en la que estaba sentado.

—Te lo ruego, Takemichi.

—No.

—¡Escúchame primero!

Puso los ojos en blanco antes de mirar al pequeño intruso que rebotaba en sus muebles. Maldita sea, cuando se detendrá con ese sonajero...

—No quiero saber cómo o por qué tienes un bebé. Lo quiero fuera de mi casa —su tono no dejaba lugar a discusiones. Takuya hizo una mueca antes de arrastrarse aún más mientras se sujetaba a su pie.

—¡Vamos Takemichi eres el único al que le puedo confiar mi primito cuando mi mamá y mi tía están fuera! ¡Makoto y Yamagishi son irresponsables y Akkun ya tiene planes! 

El rubio trató de sacudir a su amigo pero el otro hombre estaba aferrado a él.

—¡Yo también tengo planes! ¡Déjame ir, idiota! El bebé es tu responsabilidad: ¡no me lo pases a mí! 

—¡No! ¡No! ¡No! Necesito... ¡No, tengo que ir a esta reunión, Takemichi! ¡Nos hemos estado preparando durante semanas! —suplicó de nuevo.

—¡Y nosotros también! Yo digo que me dejes ir a la mierd-, ¡no puedo insultar con un niño en mi casa! —gimió antes de volver a mirar al bebé, que ahora estaba peligrosamente cerca de caer al suelo. Finalmente apartó a su amigo de él y tomó al bebé en su brazo.

—Te vas a hacer daño así...

—¡Ves! ¡Ya tienes el espíritu! ¡Sabía que tenías instintos de madre todo el tiempo!

—Takuya toma al be-

Antes de que pudiera terminar su oración, escuchó que la puerta de su casa se cerraba detrás del traidor de su amigo, dejándolo atrapado con el bebé por el día. Obsevo al bebé que ya lo estaba mirando mientras masticaba su sonajero.

—bye-bye? —el bebé se despidió con la mano mientras le preguntaba.

Dios mío. Ni siquiera sabe el nombre del bebé.

 Ni siquiera sabe el nombre del bebé

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Hakkai y Chifuyu parpadearon.

El bebé parpadeó en respuesta.

Levantaron la mirada hacia Takemichi y lo interrogaron en silencio.

—Lo siento mucho, pero Takuya descargó la responsabilidad sobre mí y huyó diciendo que yo era lo suficientemente responsable. No tengo otra opción.

Habían acordado reunirse en el parque infantil cercano al santuario abandonado para pasar el rato antes de la habitual reunión semanal que tenía el círculo interno de la pandilla, pero para sorpresa de Chifuyu y Hakkai, su amigo desteñido apareció con un bebé en un cochecito. Como un bebé real, vivo, que respira y balbucea.

Las travesuras de los trillizosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora