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Casey

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Casey

Con todo el nerviosismo apoderado en mi sistema, obligo a mi cuerpo a caminar hacia la única silla disponible que hay en el consultorio.

Introduzco mis emociones hasta el fondo. No quiero que Phillip note el peso que tiene su presencia en mí. Pero no puedo evitar mirarlo.

Un silencio de torna en el ambiente, hasta que me decido a mí misma si decir algo o no.

—Casey —dice Matteo interrumpiendo mis pensamientos—. Como te iba diciendo, tu antiguo psiquiatra vino aquí para ver los nuevos avances que están teniendo en el tratamiento.

¿En qué momento empezó a hablar?

Me convenzo a mí misma de ignorar esa incógnita, seguro no lo escuche por el colapso mental que tuve al descubrir la mirada de Adam en mí.

Ahora mi única preocupación era Phillip.

Estaba ahí, vestido elegantemente a pesar de llevar su traje de doctor. Con su postura firme, jamás bajando la guardia cuando alguien más está a su al redor. Pero cuando chocamos miradas se suaviza, como una pluma cuando toca el fondo del océano.

Phillip me confunde, siempre lo hizo y siempre será así. La manera en cómo nos afectamos me asusta de maneras inalcanzables.

Y puede que este exagerando, puede que todo esté en mi mente. Pero luego toco fondo y me doy cuenta que esta es mi realidad.

Hace un año quería irme de este lugar hasta que mi psiquiatra destruyo mis planes. Ahora tengo un debate entre lo que quiero y debo. Phillip es una persona extraña, como yo. Eso es algo que me hace mirarlo siempre, me gusta estudiarlo como a él le encanta hacerlo conmigo. Me gusta verlo desde lejos, como a él también le gusta hacerlo conmigo. Sueño con él en las noches que logro dormirme y me pregunto si el hará lo mismo.

Me afecta y me gusta tenerlo aquí luego de tanto tiempo sin verlo.

Él es mi talón de Aquiles

Matteo le indica a Phillip los avances que he tenido durante este tiempo. Pero el solo me mira, y me doy cuenta porque yo también lo hago de reojo.

Cuando estoy al lado de este hombre mi mundo se desmorona, no importa lo demás, solo importamos él y yo.

Ojalá fuera tan sencillo. Hace unos meses solo él era la persona que me daba terapias a la cual decidí alejar por mis tinieblas del pasado, él también tiene los suyos y lo sé por su mirada.

La mirada de las personas es la parte más importante de ellas. En los ojos te das cuenta de todo lo que uno no expresa verbalmente.

Antes de estar en este lugar, cuando yo era una chica "normal", todo era así.

Miradas

Las historias que puedes sacar de los ojos de una persona son fantásticas. A si escogía a mis víctimas. Las más despachadas, las que en su mirada veía la crueldad.

Solos ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora