Un Lugar Al Cual Volver [Boys Love]

Capítulo 12

-¡Es hora de despertar!  ¡vamos, vamos, levántense! 

Solté un gruñido, mientras me cubría hasta la frente con la cobija, era muy temprano todavía. 

-Hey Dorian, ¿acaso me estás ignorando? 

Bueno, podría ser que sí lo esté haciendo. 

-Do-ri-an - Mia se acercaba a donde yo estaba, mientras escuché una pequeña risa - ambos se ven lindos con las pijamas. 

Ambos, que nos encontrábamos tratando de ignorarla, para seguir durmiendo, nos enderezamos como resorte, cada quien de su respectiva cama.

-Eso no es cierto Mia, no digas tonterías. - Evan que no había hablado, en ningún momento, lo soltó mientras se levantaba de la cama. 

-No miento, les queda bien, mi tío tiende a comprar doble, por si alguien necesitará ropa, a él le gusta ayudar, parecían unos simples trapos cuando estaban guardados, pero realmente les luce muy bien a ambos. 

-Suficiente. - Evan se vuelve el centro de atención cuando toma su playera que usaba el día anterior, quitándose la que tenía encima, dejando ver un cuerpo trabajado, el único inconveniente de aquella vista, no agradable para confirmar, eran los moretones y cicatrices que llevaba consigo en su espalda y abdominales.

El silencio reino hasta que el se colocó la otra prenda, y nos miro con cara de confusión, al ver nuestra incomodidad de ambos. 

-Yo, lo siento, tuve que haber usado el baño. 

-¿De que estás hablando? ¿ cómo te hiciste eso? - Mia preocupada se acerca a él, tomándolo de las manos.

-Yo no quisiera hablar de eso ahora - seguido de eso dirige su vista hacia mi, como si yo sobrara en aquella charla, rápidamente me levantó del suelo, tomando un par de ropa de mi maleta - los dejaré solos.

Me quedé charlando con Winston que se encontraba en la sala, tomando un licuado, que por el olor deduje que era de fresa. 

-Entonces Dorian, ¿Cuál es tu plan? - Winston había dejado su vaso en la pequeña mesa mientras se acomodaba mejor. 

Yo estaba de frente a el, volteando hacía la pared que se encontraba detrás de Winston, mientras bebía un café caliente. 

-Le contesto enseguida, pero tengo mucha curiosidad sobre los cuadros que tiene colgados en su pared, ¿podría echarle un vistazo? 

- ¡Oh si adelante, hazlo! son totalmente dignos de ver. 

Me acerco dudoso hacía ellos, el primero que observé fue un campo de flores silvestres, se observaba las pequeñas flores inclinadas hacia la derecha, haciendo alusión al viento que se presenciaba en el aire, de alguna manera, te hacia transportarte totalmente al ambiente de la pintura, como si se pudiera ser capaz de oler las flores, de sentir la tierra húmeda sobre tus pies, de sentir la misma clase de tranquilidad, los colores pasteles hacían mas amena la experiencia.

Seguí observando los demás, había otros de unas calles que me resultaban conocidas, posiblemente de esta ciudad, otros de rostros de personas pueblerinas, pero nada mas.  

-¿Qué te parecen?

-No hay manera de describirlo, son fascinantes.  - algo dentro de mi se movía, sentía como el odio y rencor  que tenía sobre el arte por un segundo, poco a poco se difuminaba, el ver las pinturas me daba mas tranquilidad de la que no encontraba en ninguna de mis pinturas. 

-Lo es, ¿cierto?, lastima que no volví a saber nada sobre ella, tengo mas cuadros guardados, pero no siento que vayan aquí, siento que tienen otro lugar mas especial. - comentaba Winston mientras veía en conjunto conmigo los cuadros.