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JK's POV






Otro día más.

La misma mierda monótona de siempre.

Le di otra calada a mi cigarrillo, disfrutando de la sensación de ardor que dejaba en mis pulmones. 8:00 AM y era lo primero que hacía.

Miré a mi alrededor encontrándome con los rastros que dejaba llevar una vida como la mía. Vicios, alcohol y relaciones un tanto dudosas era lo único que conocía.

No era un pretexto, pero era a lo único que podía llegar.

— Deja esa mierda, es demasiado temprano — la voz de Yoongi inundó mi campo auditivo. Ahora me arrepiento de darle un extra de la llave de mi casa.

Sus pálidas manos abrieron las cortinas, dejándome casi ciego al instante por la brillante luz matutina.

— ¿Qué mierda haces aquí, Min?

— Créeme, no vine a hacer visita conyugal ni ha pedirte una taza de azúcar — di una calada más a mi cigarro, siguiendo al pálido con la mirada. — Te tengo buenas noticias.

— ¿Por fin tienes quien te complazca y dejarás de joderme?

— Prefiero estar soltero a tirarme a cualquier cría que use esto — dijo, levantando unas bragas rosas se entre mis cobijas. — Pensé que tenías mejor gusto que esto, Jeon.

— Que te jodan, Min.

— Si, si — restó importancia. — Al menos yo no me tiro a crías mimadas hijas de Papi.

Si Min Yoongi no habría la boca antes de que mi paciencia se acabará, juro que mi pie terminaría en su trasero sacándolo de mi casa.

— Dejando de lado tu pésimo gusto para follar — sarcasmo, el pan de casa día con Min. — Te conseguí una oportunidad de trabajo.

— ¿Qué? — incluso, el humo del cigarro quedó atorado en mi boca.

— Es una buena oportunidad Jungkook, mi amigo conoce a la CEO de la empresa y la paga es extremadamente ridícula.

— No de verdad, ¿qué? — el ceño de Yoongi se frunció ligeramente, casi como si no creyera o entendiera el porque de mi confusión. — ¿Qué mierda hiciste, Min?

— Oye, tu fuiste el que dijo que quería un mejor empleo para salir de esta mierda. No entiendo tu cara de estúpido.

— Dije que quería un mejor empleo no que lo necesitaba con urgencia — me levanté de la cama caminando a lo largo de la habitación. — Estoy bien.

— ¿Bien, uh? — sabía que mis palabras alteraron a Min, él siempre buscaba mejores opciones para mí vida pero siempre opté por tomar las peores. — ¿Para ti vivir aquí es estar bien? ¿Ahogandote en alcohol? ¿Tirandote a cualquier mujer que te hable bonito en el club? — ahora tenía al pálido frente a mi, mirándome con aquella mirada gatuna. — ¿Trabajando en una tienda de tatuajes? ¿Eso está bien para ti, Jeon?

— Tú mismo me conseguiste el trabajo en la tienda de tatuajes — contesté, en un patético intento de defensa. — Tú me contrataste.

— Lo sé, y creo que fue la peor decisión — dijo, más calmado. — Escucha, no es que no quiera que sigas ayudándome en la tienda, es solo que quiero que tengas un mejor ingreso y salgas de esta cosa que llamas hogar.

— ¿Quién te ayudará en la tienda si renunció?

— No lo sé , tal vez le diga a Jimin que deje la tienda de Busan a cargo de Gino y ayude aquí.

Suspiré.

Nunca he tenido un trabajo formal. Esas mierda de usar trajes caros, camisas con botones y corbatas al cuello no eran lo mío. Pero la idea de tener un mejor lugar para vivir, me animaba solo un poco.

— ¿En dónde es el trabajo? — la sonrisa de mi amigo apareció, sabía que había ganado en esta discusión.

— La empresa es Zin&Co. —  sus blancas manos sostenían su teléfono. En la pantalla de este aparecía un anuncio con caligrafía elegante y colores neutros. — No sé con exactitud qué puesto están ofertando, pero puedo preguntarle a mi amigo y pedirle una entrevista para ti.

— Se ve que es una empresa importante.

— Lo es, créeme — sentí un ligero apretón en lo hombro. — Entonces, ¿quieres intentarlo?

— Si esto no funciona tendrás que regresarme mi puesto en la tienda de tatuajes, ¿hecho?

— Tenlo por seguro.



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R E M É N Y ; Jeon Jungkook.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora