Aferrar(/Aferrarse/) :
Obstinarse, mantener con fuerza y convicción una idea, opinión o posición.
Chifuyu Matsuno jamás había sido un luchador. En serio. Incluso en los peores momentos dejaba que la vida le pasara por encima.
A sus siete años asumió cuando su papá alfa lo alejó de su padre omega solo por la gracia de joder a su ex, puesto no fueron compañeros destinados.
No le importó cuando sus profesores particulares le golpeaban o miraban en menos restregandole a la cara que era un tonto omega.
El día que quiso tener un gato mascota y su padre lo echó a la calle sin darle oportunidad de despedirse apenas mostró su tristeza frente al alfa.
Y todavía peor, el día en que esos dos alfas entraron a su habitación y tomaron su inocente cuerpo de dieciocho años recién cumplidos solo lloró en silencio. Claro, era mayor de edad, pero al haber sido criado en casa y alejado del mundo él para muchas cosas era un niño todavía.
Entonces un día colapsó, quizás de rabia, quizás de tristeza, quizás de injusticia, o de una dolorida mezcla de todas.
Intentó terminar con su vida, y casi lo logra.
Pero fue salvado y no simplemente eso, a cambio encontró un motivo.
-Vaya joven Matsuno, eres de los omegas duros- Por primera vez en su vida parecía que un alfa le daba un cumplido sin intención de burlarse- Perdiste una buena cantidad de sangre y podrías haberte muerto tú y el feto.
-¿Qué?- Apenas le salió la voz y comenzó a temblar.
No, no, no.
-Tienes un embarazo de seis semanas- El médico le dio una sonrisa un poco lastimera- De tal padre tal hijo, ha sabido sobrevivir.
El estaba ¿Esperando un hijo?
El médico le explicó que aún no era un ser formado, siquiera podrían saber el sexo, no tenía ni dos meses de existir y por supuesto Chifuyu sabía el día exacto en que había ocurrido.
Y en su mente ignorante e inocente, por mucho que el médico le llamase feto o embrión o lo que sea, Chifuyu solo podía oír bebé.
Un bebé, pequeño, inocente, sin haberle hecho nada malo al mundo.
"Te has aferrado a la vida aun cuando tu madre ha tratado de quitársela"
Y entonces él se aferró a ello.
Quizás estaba pensando superficialmente, pero a final de cuentas el cachorro no tenía la culpa ni la tenía el mismo Chifuyu.
Y eligió vivir, vivir por los dos.
Tomó sus cosas y huyó de casa, no miró atrás. Con nada mas que su dinero ahorrado, ropa abrigada y esta nueva motivación de salir adelante.
Y en busca de un empleo conoció a los Sano, el abuelo le dio un cuarto para dormir y su trabajo era limpiar la casa y hacer comida para sus nietos, que eran cual más distraído que el anterior. Si bien Shinichiro era mayor seguía siendo un chico descuidado y Emma por su parte aprendía de él a cocinar.
Mikey, y su mejor amigo Draken que además era el alfa de Emma, eram otro tema completamente aparte.
Así mismo, viviendo con ellos, aprendió que no todos los alfas son un mierda de seres humanos pues terminó siendo parte de la familia. Eran tan felices, todos esperaban ansiosos la llegada de su bebé.
Entonces ocurrió, de alguna extraña y horrible manera Shinichiro acabó muerto.
-Chifuyu...- Dijo su, autoproclamado hermano mayor, en sus últimos momentos en el hospital- Se me ha ocurrido un nombre.
Claro, si se habían estado peleando durante meses por el nombre de su bebé.
-¿Cuál es?- Las lágrimas caían sobre la sabana blanca. Todos en el cuarto a la espera de su respuesta.
-Haruki- Susurró apenas.
Entonces sonrió, y se fue.
Así, luego del funeral, un pesado luto y la idea de que las cosas no se quedarían así, el abuelo, Emma, Draken, Mickey y Chifuyu recibieron junto a las flores de cerezo y un clima agradable a Haruki.
Haruki, niño de la primavera.
Tenía enormes ojos azules y pelo oscuro, tan bello y elegante a los ojos que nadie pensaría que tenía un carácter de temer dentro.
Sin siquiera dudarlo, Haruki Matsuno sería un alfa al crecer y a Chifuyu no podía importarte menos.
Y bien, volviendo digamos, a la actualidad, Chifuyu era el líder estratégico de este grupito de inadaptados mientras que Mikey era la fuerza. Aprendió a mantener el control hasta en el peor momento pero entonces ¿Por qué había comenzado a hiperventilar? Mikey le habló de un nuevo integrante y estuvo tan interesado en saber qué les podría aportar que cuando, incluso sin haber cruzado la puerta, pudo olerlo sintió pánico recorrerle el cuerpo.
-Chifuyu- Mikey de dirigió a el primero, estaba solo, de momento- Traje conmigo a Keisuke Baji, ya me dirás despues tu opinión.
-Por supuesto.
Ahora con la puerta entreabierta era peor, el aroma a caramelo recién preparado le llenó los pulmones.
Jamás había pensado en los alfas, en parejas, en el destino o el romance ¡Es que no tenía tiempo! Pero justamente ahora y en estre formato la vida decidio enviarle un alfa.
Su alfa.
No entres en pánico, él no puede olerte.
Tomaba inhibidores ya hace años, de no ser porque tenía a su cachorro que buscaba el aroma de su madre pasaría que hace tiempo se hubiera dopado en medicina hasta borrar su olor por completo.
Ahora sólo le quedaba una opción y esta era desilucionarse con el alfa.
Que sea feo
Que sea feo
Que sea feo
Que sea feo
-Con permiso - Un chico alto, de su edad o mas, tenía sedoso cabello largo y oscuro como la noche. Ojos cafés y sonrisa algo particular, los dientes estaban derechos y sin embargo notaba como sus caninos sobresalían- Mucho gusto.
Mierda, era guapisimo.
No pasa nada, es un alfa, las probabilidades de que sea un imbécil son altas.
Mikey le explicaba la situación mas a fondo, todos los presentes opinaban, Baji respondía y Chifuyu quería llorar porque no era capaz de encontrarle una sola imperfección.
Algo debe de tener.
Sin importar como, incluso lo hizo su guardaespaldas en reemplazo de Mikey, usaría cada carta y cada truco para darse motivos de no decirle nada al chico sobre ellos siendo pareja destinada. Lo pondría a prueba hasta encontrar alguna razón, la más mínima.
Chifuyu estaba decidido, si Keisuke Baji es su alfa él llegará hasta las ultimas consecuencias buscando razones para convencerse de que no debe enamorarse de él. Por mucho que su primera impresión haya sido tan magnifica como la llegada de una noche estrellada fresca luego de un pesado dia de calor.
AAAAAAA APARECIO, bueno ya había aparecido, pero finalmente tenemos un poco de historia desde el punto de vista de Chifuyu ¿Como quedaron? Kdjdjddjnd
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Inevitable
FanficNadie le dijo a Keisuke Baji que ayudar a una omega sin esperar nada a cambio tendría una, demasiado inmediata, recompensa, aunque claro primero tuvo que recibir una monumental patada de Mikey Sano. Luego de ser interrogado y concluir que tanto ello...