Yo quiero un mundo contigo. ×jdom×

capítulo 40.

20 De Mayo.
Yo: AAAAAAHHHHH.
Jesús: vamos cariño, tú puedes. -dijo apretándome la mano.
Médico: Vamos señorita, aprieta, ya sale.
Yo: ¡NO PUEDO MÁS!
Jesús: Vamos cariño, yo quiero un mundo contigo ¿Recuerdas? -volví a empujar.
Médico: vamos vamos, ya se le ve la cabeza.
Yo: DANIELAAAA. -volví apretar con todas mis fuerzas, de tal forma que se escuchó el llanto de mi preciosa niña.
Médico: Aqui está, enhorabuena, ya sois padres.
Jesús: Nuestra tan esperada hijita amor. -dijo besándome la frente.
Yo: por fin, cojela Jesús.
Jesús: cojela tú primero.
Yo: te dicho que la cojas tú primero.

Estaba sudando, de tal presión, joder me duele todo.
Se le veía tan feliz mientras cogía a su princesa, le miraba sonriendo, que dulce es, dios.
Quito la mirada de la niña y me miró. Jesús: es igual de preciosa que su madre. -dijo dejándola en mis brazos.
La verdad que era realmente preciosa.
Cómo su padre.
¿Desde hace cuanto no escribo?
Desde mi luna de miel, madre mía, han pasado tantas cosas.
Han pasado casi un año desde que nos casamos.
Estabamos deseando traer a la chiquitina a la familia, a todos le hacía ilusión, especialmente a nosotros.

Tras 2 días.
Jesús: cariño, ¿y la cuna, para montarla?
Yo: en la cochera.
Mamá: ¿aún no la habéis montado?
Yo: Da mala suerte, o eso dicen.
Eva: que tontería, ¿no?
Yo: bueno, tú hijo.
Jesús: más vale prevenir que curar. -dijo riéndose.
Juan Carlos: mi nieta, ¿dónde esta? -dijo entrando por la puerta mientras con su mirada la buscaba.
Yo: tú mujer la tiene.
Eva: Jesús hijo, convencer a Marina y Dani para traer otra alegría, que se le pasa el arroz a mi Marina.
Jesús: que exgaerada mamá, que ellos se han casado hace sólo 5 meses.
Yo: no le queda nada para que se le acabe el arroz.
Eva: bueno, pero meterle prisa.
Yo: si si.
Claudia: y mi sobrinaa. -os recuerdo que Claudia es la hermana de la protagonista.
Jesús: los vecinos nos van a echar.
Yo: además de verdad, Papá ayuda a Jesús que es muy torpe. -dije riéndome.
Jesús: Que graciosa eres.
Yo: en el fondo me quieres.
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Yo: Cariño, dejame a la niña y vete ya a la ducha.
Jesús: Vale, ¿ya te has duchado?
Yo: sí, venga que hay que preparar la cena.
Jesús: tiene tus pestañas, tus ojos. -dijo dejándola en mis brazos
Yo: tiene tus labios, tu barbilla.
Jesús: es igual de preciosa que su madre. -dijo basándome.
Yo: y que el rey de la casa.
Jesús: te quiero. -dijo acariciándome la mejilla suavemente, mientras se acercaba lentamente a mis labios, hasta que nos fundimos en un beso lento.
Yo: tú princesa se pone celosa. -reí.
Jesús: jamás. -dijo dándole un tierno beso en los labios.

Buenos siento muchísimo no haber subido, la verdad es que ya quiero terminarla, se me hace ya muy pesada.
Espero que os haya gustado, ya que el próximo capítulo probablemente sea el final.