capítulo 10.

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Otro día más conjelandome, Sevilla estará muy bonita en navidad pero hace un frío de cojones. Bueno, me levanto , ni me visto es sabado, me voy al salón ya que es el sitio más calentito de la casa.
Marina viene ahora a casa, vamos a estar la mañana juntas ya que mis padres se han ido a una exhibición de gimnasia de mi hermana.
DIIIIIMMMMDOOOOOOOOOM
: Vooooy.
Marina: venga que hace frío tía.
: Sos, ¿no venías solo tú?
Marina: me los encontré en la calle y se lo conte.
: pues avisa.
Dani: ei, no problem, veo que estáis ocupadas.
: no hijo, no es eso -dije mientras entrábamos dentro.
Jesús: que sexi con el pijama, ¿intentas provocar? -dijo riendo.
: si uf, con mi pijama de la vaca.
Jesús: ya, ts, pues siento decirte que no lo has conseguido.
: bueno, pues es lo que ahí, yo que iba con mis buenas intenciones intentando provocar.-dije riendo.
Jesús: tss lo siento, sé que te duele.
: ya claro, seguro que si me pongo unos buenos pantalones por los sobacos enseñando medio culo y las tetas en la boca seguro que te provoco, yo lo veo.
Jesús: que va, tú no provocas ni a tu padre. 
: me cago en tu madre. -le pege una ostia, más bien ostion.
Daniel: eh con mi futura suegra nada.
: anda el gracioso.
Jesús: dejala bro, le tiene que entrar la regla. -dijo riendo.
: La gracia allí, ve a por ella.
Dani: Vamos tonta, no te endades, que yo te queru.
Jesús le miro con tal cara que lo flipe.
Marina: Jesús no te enceles.
Jesús: no me encelo, no es nadie como para que me tenga que encelar.
Marina: yaya..
: pues como no soy nadie, a ese nadie ni le hables.
Jesús: enga ya bebé.
: mmm, dani, vamos a jugar a el videojuego que más le gusta a ese nadie.
Marina: JAJAJAJAJAJAAJ hija puta.
: Nadie, az las palomitas, y te doy 5 cent, venga corre.
Jesús: tú casa, no la mia.
Marina: venga te acompaño, dividimos los 5 cent. -dije riéndose.
Jesús: claro, ¿y qué hago yo con 2cent?
Marina: estamparselos a la cara.
Jesús: buena idea.
Volvieron con las palomitas, todas chamuscadas.
: ea sirviente ya no te doy más ni un cent, venga a hacerlas de nuevo.
Jesús: ¿si? -me tiro todas las palomitas el capullo, empeze a llenarle su pelo de mijitas, sos, parecemos niños chicos.
: ¿tú qué eres muy chulo? -tenía un puñado de palomitas en la mano.
Jesús: ssss... -dije metiendole el puñado en la boca, el respondió escupiendomelas pero bueno, los demás se quitaron rápido del medio.
: ahora sirviente limpia todo lo que has liado.
Jesús: no, yo soy 'nadie'
: eres MI SIRVIENTE Y OBEDECES. -dije sería a lo que no pude evitar reírme.
Jesús: podre de tu marido.
Marina: pues dentro de poco serás tú a si que sh. -dijo asomándose por la puerta.
Dani: ahí le has dado.
: sus ganas.
Jesús: las tuyas.
: que te calles, no mejor limpia.
Jesús: si por los cojones.
: venga te ayudo, pero como no recojas te doy con la escoba.
Jesús: eso sí.
Dani: ¿pido pizza?
Marina: jé sí.
: SIIIIII -dije gritando desde la cocina, mientras tiraba las palomitas a la basura.
Comimos y decidí acostarme, todos o casi todos estabamos dormidos. Cuando vi que una mano pasaba por mi cintura.
Como mi sofa es de los largos púes dormidos todos juntos, ya que es grande y largo para poner las piernas, Marina a mi lado y al otro Jesús, estaba dormido ya que me giré, digo será sin a verse dado cuenta a si que pasé.
Me despierto, no puedo dormir más.
Me visto, ya era hora, me dio igual estar en pijama como tenía la bata encima, total son mis amigos, no creo que se asusten de ver a una niña en pijama.
Para salir ahora al cine, una película de miedo por lo cuál mis y los de Marina chillidos son algo serio. Ellos se parten el culo de nuestra reacción, ay dios.

Yo quiero un mundo contigo. ×jdom×Donde viven las historias. Descúbrelo ahora