Añoranza

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¡Hola de nuevo!

Antes de leer me gustaría aclarar que la primer parte es desde el punto de vista de Shi QingXuan. Eso aclarado, espero que lo disfruten. Gracias por su apoyo.

Después de ese día, llegaron varios platillos a su habitación, cada tanto traían consigo algo de carne o pan dulce lo cual lo hacía alegrarse en demasía

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Después de ese día, llegaron varios platillos a su habitación, cada tanto traían consigo algo de carne o pan dulce lo cual lo hacía alegrarse en demasía. En el día escapaba con ayuda de su abanico para poder recorrer Yummeng, le gustaba observar las flores de lotos donde en los bordes del lago, una manta verde de musgo se alojaba en la roca.

Ese día no había sido la excepción, se había detenido en uno de los extremos del lago donde se podía observar como los diminutos brotes de loto florecerían en pocos días, le gustaba ese lugar ya que justo a un lado había un frondoso sauce que era distintivo del lugar, sus largas hojas caídas se dirigían al lago, además podía mecerlas cada que creaba pequeñas ráfagas de viento.

El ambiente próspero y alegre que prevalecía le parecía algo digno de admirar, conoció la historia cuando él mismo en su tiempo de old Feng vagó entre los límites de las sectas, manteniéndose alejado de la guerra donde encontraba a algunos vagabundos con los cuales compartía una amistad por poco tiempo.

El líder Jiang había hecho un gran trabajo levantando su secta desde las cenizas, pensó que le hubiese gustado conocer a Yummeng antes del asedio, pensaba que seguro era tan alegre y dichoso como ahora.

También sabía que tenía un templo en aquel lugar, era uno de sus lugares favoritos ya que se encontraba al final de unas escaleras de roca donde al llegar, estaba establecido su santuario con árboles a su alrededor que habían sobrevivido a las llamas ardientes del asedio, incluso con el tiempo un pequeño jardín de flores coloridas adornaban la entrada.

Recordó que en LanLing Jing también existe uno, adornado de exuberantes ornamentaciones de oro y las ofrendas siempre llevaban consigo láminas de oro en honor a su hermano; aunque a comparación del templo de Yummeng, éste era sólo reservado para el líder Jin y ancianos. Completamente sesgado a las personas comunes.

El de éste lugar era accesible para todos los ciudadanos y la rama principal de la secta, por ello mismo a pesar de ser relativamente sencillo, se sentía mucho más cómodo y cálido. Debía admitir que una de las razones que lo hacía su favorito también era por que aquí tomaban en cuenta a ambos, a pesar de que adoraban su forma femenina; no sólo era la acompañante de Shi WuDu o incluso, según los cuentos, su esposa.

Ahí se le veneraba y rezaba reconociendo su poder, creyendo que era una mujer fuerte e incluso más poderosa que su hermano.

Al recordar a su hermano, su brillante sonrisa se esfumó lentamente mientras deslizaba su espalda en el sauce para apoyarse en sus tobillos y abrazar sus piernas, tomó una delgada vara y empezó a dibujar en la tierra; lo extrañaba, aún sabiendo todo lo que ocultó sabía que siempre vio por su bien aunque tampoco aprobaba la forma de hacerlo. Después de todo, sólo eran unos niños en ese entonces.

Aquel templo abandonado donde te conocíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora