TRES LUNAS |Omegaverse|

Capítulo 1

Un pequeño lobo café se encontraba corriendo por el bosque, mientras perseguía a un lindo conejo. Estaba a punto de atraparlo cuando el conejo se metió a una madriguera escapando de su cazador. El lobo al ver que su presa había escapado decidió dar media vuelta y volver por dónde había venido.

Cuando estuvo en el lugar donde dejó sus cosas cerró sus ojos invocando el cambio convirtiendose en un lindo chico castaño de estatura baja, el cual tenía unos lindos ojos color miel y piel suave, además de unos lindos mofletes y nariz de botón que lo hacían lucir adorable.

Su nombre era Jimin un lindo Omega con olor a bosque y vainilla, que vivía junto con su abuelo alfa desde que era pequeño, hace un año su abuela Omega había fallecido dejándolos solo a ellos dos. Su abuelo no era una persona muy cariñosa pero sabía que lo quería y se preocupaba por él. Después de todo se hicieron cargo de él desde que tenía 5 años.

Su madre se había ido cuando encontró a su pareja destinada y ningún alfa se quería hacer cargo de un hijo que no era suyo, así que Sun Hee -su madre- no le importo dejarlo de lado. A su padre nunca lo conoció ya que este desapareció antes de que el naciera. Cuando ellos se conocieron Sun Hee había entrado en celo, así que el alfa no pudo resistirse y terminaron acostándose. Semanas después Sun Hee descubrió que estaba embarazada pero su padre ya se había ido del pequeño pueblo en dónde vivían.

Pese a todo su madre decidió tenerlo, pero años después conoció a su actual pareja así que decidió dejarlo con sus abuelos los cuales tenían un terreno en las afueras del pueblo, cerca del bosque. Después de ese día no volvió a saber de ella, ni siquiera había ido a visitarlo o preguntar por él

Y desde entonces ha vivido aquí, disfrutando de la naturaleza y ayudando a su abuelo en los trabajos de la pequeña granja que tenían.

Cuando tenía 15 años se presentó como Omega y contrario a lo que pensó su abuelos lo apoyaron en todo. Su abuelo lo protegía de todo alfa que se le acercara cuando iban al pueblo por suministros o a vender su mercancía. Tres años después seguía siendo lo mismo, su abuelo nunca lo dejaba salir solo al pueblo para que ningún alfa se aprovechará de él.

Cuando cumplió los 17 años y antes de que su abuela muriera le hablo acerca de una profesión que había en su familia, se trataba de una marca de nacimiento la cuál eran dos medias lunas encontradas. Su abuela decía que cuando un Omega de su familia nacía con esa marca significaba que tendría dos alfas destinados.

Jimin nació con esa marca detrás de su cuello y cuando se enteró sintió una gran felicidad al saber que tendría dos personas que cuidarían de él. Jimin era una persona muy dulce y soñadora que cada noche se imaginaba como serían sus dos alfas.

Saliendo de sus pensamientos comenzó a cambiarse, necesitaba llegar a la granja con su abuelo ya que había prometido ayudarle a alimentar a los animales, así que vistiendose de manera rápida tomo su bolsa y corrió hacia su hogar.

Al llegar se limpió los zapatos en el tapete para después entrar y dirigirse a la cocina donde estaba su abuelo.

- Abuelo ya llegué.

- Te he dicho que no me gusta que andes solo por el bosque.

- No me va a pasar nada no te preocupes.

- Eres tan terco como tu abuela, solo espero que tengas cuidado.

- Siempre tengo cuidado abuelo. Dijo Jimin ayudándolo a servir la comida.

Cuando estuvo servida los dos se sentaron en la mesa para comer mientras platicaban.

- Mañana iré al pueblo. Dijo su abuelo.