My only Sun - [Queen / Au! Vampire]

12 • The Children of the Night

— No te muevas —

Freddie y Brian hacía tiempo que se habían movido para estar a su lado, mirando en la misma dirección en la que apuntaba su ballesta. Sabían que no les estaba hablando a ellos. Le estaba hablando a él.

Paul estaba allí, apoyado en una tumba, con los brazos cruzados y sonriendo.

— Vaya, vaya, vaya, una cazadora de vampiros, ¿eh? — se rió, mirando a la humana de arriba abajo. Obviamente no estaba asustado, pero Brian notó que Clare tampoco tenía el menor miedo.

— ¿Eres Paul? Me esperaba algo... no como tú — dice ella secamente, haciendo que Paul le muestre una sonrisa.

— Vaya, ¿no eres una dama? Deberías bajar ese arco antes de que tus hormonas te superen — le responde con facilidad. Brian siente que la ira se enciende en ella, pero admira la rapidez con la que anula el sentimiento, manteniendo sus emociones bajo control.

Freddie permaneció callado mientras estudiaba al vampiro mayor. Algo estaba... fuera de lugar en él... y podía sentir a alguien más. Sus ojos captaron un cambio de figura detrás de Paul.

— ¿Qué escondes? — preguntó, mirando a la figura detrás. La sonrisa de Paul se hizo aún más grande, si eso era posible. Sus ojos tenían un brillo oscuro.

— Oh, solo mi pequeña presa. ¿Te gustaría conocerlo? — preguntó casi inocentemente. Brian podía sentir la ira hirviendo en Freddie. Ambos sabían lo que Paul ocultaba. Sólo necesitaban que él lo mostrara.

— Ven ahora, mi dulzura, muéstrales tus bonitos ojitos — Paul arrulla suavemente, moviéndose a un lado. Y efectivamente, las sospechas de Brian y Freddie se confirmaron. Allí estaba un joven agarrado al brazo de Paul. Freddie sintió que su corazón se rompía cuando miró los encantadores ojos verdes del hombre. Parecía tan asustado y confundido.

— Has convertido a otro — Freddie afirma simplemente, sin poder apartar su mirada del joven que se aferraba a su amo.

— Lo hice. Este es John. Lo creé después de que te fueras. Mientras te buscaba, me encontré con él. Sus ojos eran demasiado bonitos para dejarlos pasar — Paul habla casi con cariño mientras mira a su recién nacido, acariciando suavemente la mejilla de John. — Es sólo un bebé. Sólo tiene 40 años. Deberías agradecérselo. Durante dos años le he estado alimentando con mi sangre, lo que me ha hecho renunciar a seguirte la pista durante un tiempo —.

— Él es... — solo 40 años. Freddie estaba desconcertado ante la criatura. Brian llevaba al menos cien años de su nueva vida cuando Freddie lo encontró. Incluso Brian ahora todavía era considerado un recién nacido. Los vampiros no eran considerados adultos hasta que tenían quinientos años o más. Pero era muy raro ver a un recién nacido por ahí a una edad tan joven y frágil.

— Me importa una mierda todo esto. Coge tu pequeño engendro y piérdete — Clare resopla, sin dejar de apuntar a Paul con su ballesta. El vampiro más viejo frunce el ceño y le brillan los ojos.

— Todavía no me he divertido — Paul comienza a caminar hacia ellos. — Todavía tengo un juego que jugar, ya sabes... Es interesante. Estáis todos tan decididos a proteger al pequeño humano de Brian, pero mientras estáis aquí hablando de ello, ¿quién está con él ahora si necesita protección? ¿Y si decidiera hacerle una visita en su lugar? — sonríe mientras observa las expresiones en los rostros de cada uno de ellos. Los tres se dan cuenta de la verdad de sus palabras. En un abrir y cerrar de ojos, Brian se había ido.

Freddie se coloca delante de Clare, sin permitir que Paul avanzara más. Miró fijamente a su "padre" mientras este le devolvía la mirada con una sonrisa de satisfacción.

— Querido Freddie — Paul niega con la cabeza antes de que su mano salga disparada y lo tome por el cuello. Freddie jadea mientras el contrario le alza. — Te había amado. Pero tengo algo nuevo. Algo que nunca me desobedecerá. Y ahora puedo deshacerme de ti. Me pregunto cómo le irá a Brian sin ti a su lado — se pregunta mientras el vampiro más joven se debate entre sus garras.

Un dolor punzante le recorre de repente el brazo, lo que hace que deje caer a Freddie al suelo. Gruñe, sosteniendo el brazo cerca de él antes de arrancar una flecha de su brazo y tirarla al suelo. Gruñendo, levanta la vista y se encuentra con los ojos de Clare, que recarga su ballesta rápidamente.

— ¡Clare! — Freddie grita cuando el otro vampiro se lanza hacia ella, pero ella es rápida en sus pies. Se aparta fácilmente de su camino y le dispara por la espalda. El mayor grita cuando se apresuró a agarrar su arma. Se la arranca de las manos y la empuja al suelo. Clare rueda hacia atrás, sin permitirse tambalearse, y agarra una daga del interior de su bota. Sin embargo, en lugar de lanzar la daga directamente a la criatura que viene tras ella, lanza el arma afilada a otra dirección, haciendo que Paul se detenga en seco al escuchar un agudo grito de dolor.

Freddie mira para ver al recién nacido en el suelo con una daga en el hombro, lloriqueando y temblando como un gatito asustado. Solo quería correr y consolar al joven, pero escuchó un gran golpe, haciéndole mirar rápidamente a tiempo para ver a Clare volando de nuevo en el suelo. La sangre escupía de su boca mientras Paul la golpeaba con su propia ballesta antes de lanzar el arma apenas fuera de su alcance.

— Tú, perra, arruinaste mi nuevo juguete — Paul gruñe mientras le da una patada en el estómago antes de acechar a John y levantarlo de un tirón, sin importarle el dolor que sentía. —La próxima vez que nos veamos será la última. Recuerda mis palabras —.

Y con eso, Paul y su recién nacido se fueron. Freddie sintió rabia en su interior.

¿Cómo pudo tratarlo así?

Estaba tan asustado... Él, pobrecito...

Y Paul lo ve sólo como un juguete... Igual que a mi

Freddie sintió que se le llenaban los ojos de lágrimas al pensar en el pobre bebé. No quería nada más que asegurarse de que estaba bien. Después de todo, le golpearon en el hombro con una daga.

— Mierda — Clare jadea mientras se acurruca ligeramente. Freddie se precipita hacia el humano herido. El olor de su sangre lo rodea. Hay un enorme moretón en el lado de su cara por haber sido golpeada por la ballesta y la sangre corría por sus labios. Freddie no quería imaginar el moretón en su estómago.

— ¿Estás bien? — le preguntó, ayudándola suavemente a sentarse. Ella asiente con la cabeza antes de levantarse temblorosamente. Freddie admira su fuerza, pero sabe que la humana necesita tiempo para descansar y curarse. Le permite apoyarse en él mientras ella coge su arma del suelo.

— ¿Brian? — ella mira a Freddie y le dedica una pequeña sonrisa.

— Seguro que está cuidando de Roger. Y Paul estará ocupado con... John. Roger debería estar a salvo por ahora — comenta — ... ¿Tenías que herir al recién nacido? —

— No era mi plan inicial. Pero mi plan principal es siempre sobrevivir. Si lanzara una daga así a un adulto, no haría mucho, pero lanzársela al recién nacido creó una distracción mayor — ella suspira suavemente. Freddie entendía a qué se refería en primer lugar.

— No debería haberse metido en esto... solo está asustado — Freddie murmura. Clare lo mira fijamente por un momento.

— Quizá no... pero era él o nosotros — dice con seguridad.

Habla como una verdadera cazadora. Freddie sonríe ligeramente antes de que una idea le asalte.

— Es él o nosotros, pero ¿y si estuviera con nosotros? — Freddie piensa en voz alta mientras caminan.

— Uhm... ¿disculpa? — Clare vuelve a dirigir la mirada hacia él.

— Nada — él le sonríe.
Todavía no hay nada. Pero... lo salvaré.

PRÓXIMO CAPÍTULO

"Después de encontrarse con el otro vampiro, Brian se vuelve posesivo y encuentra una manera de marcar a su amante. "