Un Amor Real | Merthur

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A la mañana siguiente se despertó por los gritos de dolor fuera de su habitación, se habría asustado de no ser porque ya intuía de quién eran, se levantó un tanto somnoliento y salió de su cuarto sin cambiar su ropa

-¡Me duele, por favor sea más cuidadoso! -

-Apenas estoy tocandote, tengo que limpiar la herida si no quieres que se infecte, entonces conocerás lo que es el dolor-al mirar la seriedad en el rostro del anciano Valdir se mordio los labios por adentro, aunque aún soltaba algunos quejidos

No había notado la presencia del muchacho, o más bien, el dolor no dejaba dirigirse a él apropiadamente y mejor no lo intentaba. Merlín lo miraba con algo de pena, pero en manos de Gaius pronto se curaría; aunque no podía hacer mucho por alguien que por cuenta propia recaía

Se dio una pequeña sorpresa al ver a un caballero sentado en una silla con la cabeza colgado en el respaldo de esta, se le hacía familiar y cuando se acercó un poco, no supo su reír o girar los ojos

-Buenos días, Merlín-Gwaine le sonrió, ocultando la reciente expresión de incomodidad con la que lo miró

-¿Bebiste anoche?-

-Sólo un poquito, Percival y yo estuvimos persiguiendo a los bandidos que escaparon ayer, regresamos muy noche y nos dejaron descansar y pues... Aproveché-

-¿No crees que te puedas meter en problemas?-

-Espero que no, por eso vine, pero veo que Gaius está ocupado-

-Tengo mejores cosas que hacer que atender a borrachos-respondio sin siquiera voltear

-Pero soy cliente habitual, debería tener prioridad-el medico no le respondió, pero Merlin ya sabía lo que tenía que darle, Gaius siempre tenía preparado su brebaje para la resaca en caso de que éste honorable Caballero se presentara

Y aunque lo haya tomado más de una docena de veces, nunca podía evitar hacerle mal gesto a la botella después de tomarlo y al menos esa parte disfrutaba el anciano

-Espera ¿Él es el tipo a quien atacaron ayer, no? -se levantó cuando el dolor había bajado un poco, y se acercó a la camilla donde estaba Valdir-¡Pensé que había muerto! Amigo tenias revanada toda la panza

-Sí, no me lo recuerdes, gracias-pidió entre quejidos, al menos la limpieza ya había terminado

-¡Gaius eres increíble!-felicito con una ligera palmada en la espalda, el médico sólo asintió, no quería llevarse el crédito de la joven rubia pero tampoco se lo podía dar

-Ya, ya, niños, ya casi es hora de que empiezen a trabajar, deben alistarse-aviso y de inmediato el joven mago regresó a su habitación para cambiarse y Gwaine se quedó a esperarlo excusándose de que aún tenía malestar

Cuando salió de nuevo, volvía haber una persona extra en el consultorio, pero esta vez una más agradable para Merlin

-Buenos días, Merlin-saludo Támara con una sonrisa, al lado de su tío sosteniendo su mano

-¿Qué haces aquí tan temprano? -se acercó con una sonrisa pero no interrumpió el momento que la chica tenía con su familiar

-Quería ver cómo estaba mi tío, y parece que esta genial, quejándose como siempre de todo-dijo en broma y el hombre le estrujo la nariz un poco

-Gaius me ha cuidado diligentemente, sé que puedo ser un poco difícil de tratar, pero se lo agradezco mucho-le sonrio con pena, pero el anciano le resto importancia con un movimiento de cabeza, estaba acostumbrado a tratar con pacientes difíciles

-Quisiera quedarme, pero tenemos trabajo que hacer-interrumpió el caballero que tomó al mago del brazo y lo sacó a rastras de las cámaras, solo dejándole despedirse con un grito