My addiction || Jack Conway y tu [EN EDICIÓN]

39. Cositas...💖✨

•°•Narra Adara•°•

Intento apartarlo de mi pero me presiona más, disfrutando el contacto que estamos teniendo.

Mi mente no puede estar clara por el orgasmo que acabo de tener gracias al que no deja de besarme y suspiro.

—¿Acabaste? —Me pregunta, subiéndose sobre mi otra vez y medio asiento—. Perfecto...

Vuelve a mis labios y no dudo en corresponder el beso. Sonrío cuando él lo hace y no puedo evitar sentir un calor algo lindo en mi pecho.

Me envuelve en sus brazos y ni noto el frio del ambiente. Creo que la lluvia es peor que antes y luego de unos momentos se aleja un poco para respirar, agitado, a lo cual aprovecho para alejarlo. Me mira algo confundido por mi actitud y suspiro.

—Buenas noches... —Le doy la espalda y puedo sentir su mirada en mi.

El arrepentimiento no se demorar en llegar luego de unos minutos, sintiéndome terriblemente mal y con ganas de desaparecer. Estiro mi mano para tomar mi ropa pero... Jack la toma, regresandola a su lugar.

—No te veo hace tres años, Princesa... —Murmura y lo miro sobre mi hombro—. Dejame disfrutarte un poco más...

Un relámpago ilumina la habitación, lo que me hace sobresaltar y la calentura que habia quedado atrás vuelve con más fuerza.

Comenzamos a besarnos suavemente y no puedo evitar reír cuando me sube sobre él.

Evito dar un gemido, mordiendo su cuello cuando la mete en mi suavemente. Acaricia mi espalda y recuesto mi frente sobre la suya.

Lo monto suavemente para acostumbrarme al gran tamaño que se carga y es inevitable pasar desapercibido sus varoniles jadeos y leves gemidos que me regala, ni siquiera se molesta en ocultarlos.

Dios... Está muy exitado...

Acelero los movimientos sincronizando con el de abajo y luego de bastantes minutos asi Jack no puede evitar correrse en grandes cantidades.

Río cuando muerde mi cuello y gimo al correrme también, bañando su polla con mis jugos.

Intento descansar en su pecho para dormir, totalmente agotada por las últimas dos horas y miro al Superintendente algo confundida cuando nos intercambia de lugar, metiéndose entre mis piernas.

—¿Jack? —Me cubre la boca con su gran mano y mi gemido se ve ahogado cuando se clava en mi.

Sigue embistiendome como un animal por los siguientes veinte minutos, logrando que me corra por tercera vez y por fin saca la mano de mi boca, robándome un gran jadeo.

Clavo mis dedos en la piel de su espalda mientras no deja de moverse y... Sus labios me sorprenden.

Deja de moverse cuando lo empujo. Quién se cree para besarme en medio del sexo. Dios, parece que no recuerda.

—Gilipollas... —Le pego en el pecho y me toma de mis muñecas, alza las manos a mi cabeza y luego las sostiene con una sola malo—. Suéltame Jack...

Puedo verlo sonreír y comienza a moverse otra vez, haciendo caso omiso a mis pedidos. Lo está disfrutando demasiado y sin dejar de moverse me toma de la barbilla, uniendo nuestros labios en un beso que me cuesta corresponder.

Pero finalmente dejo que haga lo que quiera conmigo.

•°•°•°•

Horas después...

•°•°•°•