T/N Sano, hermana menor de Mikey siempre estuvo enamorada de Baji Keisuke, el amigo de su hermano, era prohibido para ella pero eso no impedía que ambos se quisieran, sin embargo, el día que Baji estaba a punto de declarársele este termina en la cár...
Querida t/n, no se si vaya a darte esta carta un dia, como sabrás estoy en prisión, se que has venido todos los días a visitarme, lo cual, me avergüenza mucho, no puedo permitirme verte a los ojos, soy todo lo que esta mal en este mundo, mamá llora cada vez que me viene a visitar y no quisiera verte a ti hacerlo, eres un solecito, un solecito que merece brillar por eso mismo necesito sigas tu vida sin mi, te amo, creo que nunca he sentido tanta felicidad en mi vida como cuando te veo pero quiero que tu sientas lo mismo por eso quiero que seas feliz y sigas sin mi...
~
Esta era la carta que Baji nunca me dio, aquella carta descansaba en mi repisa y mi curiosidad había despertado pero ahora aquellas palabras divagaban en mi mente y mi corazón volvía a sentirse tan cálido como cuando Baji me dijo Te amo por primera vez...
Pero fue cuando volvió a mi mente, Chifuyu...
~Baji~
¡Baji!
....
—¡Baji Keisuke levántate en este momento y dale de comer a esos gatos que ya tienen hambre!—grito mi madre desde la cocina levantándome de golpe
Miau
—Buenos días bigotes—le dije aun medio dormido y con la voz ronca al pequeño gato negro que se subía sobre mi cabeza—¡Ya voy mama!—exclame a mi mamá desde el cuarto
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—¡Y apúrate a venir a desayunar para que te vayas a la escuela!—me respondió.
Mierda es cierto hoy hay escuela, creo que no hice la tarea...efectivamente no la hice.
Me apresure a levantarme para sacar el costal de comida y darle de comer a los 7 gatitos que estaban esperando su comida en mi cuarto, los acaricie, cambie su agua y me dispuse a ponerme el uniforme y a lavarme la cara para irme a la escuela.
—Buenos días ma—salude a mi madre mientras esta me servía un plato de huevos con tocino—Oh, no gracias ma no tengo ham...
—¡Te los comes dije!—respondió mandona a lo que rápido me senté en la mesa.
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