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Kaname y Zero se habían vuelto una pareja, aunque a la vista de los demás eran buenos amigos. Yuuki estaba encantada con la situación y pensaba sacarle partido.

- ¿Invitaras a Kaname a cenar? - pregunta Yuuki a su hermano

- Ayer cenó con nosotros -

- Sí, y se quedó platicando conmigo cuando fuiste a acostar a Hana - Yuuki comenzó a sonreír - Nos besamos -

- ¿Qué? -

- Eso, nos besamos. Estoy casi segura que su historia con esa perra, acabo -

- Kaname te besó -

- No pongas esa cara, que no he matado a nadie -

- Pero ustedes ya están divorciados - dice Zero

- Y qué, eso se puede solucionar fácilmente -

- ¿Y si Kaname no siente lo mismo por ti? -

- Lo siente, yo lo conozco mejor que cualquier otra persona. Él volverá conmigo. Te lo garantizo -

Zero se quedó sin palabras, Kaname había besado a su hermana. Y si volvían ¿Qué pasaría con él? Por qué tenía que pasar algo así cuando él estaba nuevamente confiando en el amor.

Al día siguiente cuando Kaname fue a casa de Yuuki, está lo invito a ir con ellos a la casa de Kaien, el padre de Yuuki estaba de cumpleaños el sábado y la familia iría a saludarlo. Yuuki quedó gratamente sorprendida cuando su invitación fue aceptada.

La semana fue un tanto tensa, Zero estaba molestó y Kaname no sabía el motivo por lo que el viernes después de un largo turno de 12 horas prácticamente secuestro al peliplateado.

- ¿No sé supone que vamos a casa? - dice Zero al ver que Kaname tomaba una ruta diferente a la habitual

- Te iré a dejar a casa de Yuuki una vez me digas que te pasa -

- No me pasa nada -

- ¿Nada? Del martes prácticamente no me hablas, no eres capaz de mirarme a la cara. ¿Hice algo que te molestara? -

- No. Estoy cansado. Quiero irme a casa -

- Ya te dije no te iré a dejar hasta que me digas qué pasa -

- Besaste a Yuuki. Volverás con ella -

- Claro que no bese a Yuuki ¿Quién te dijo eso? -

- Ella misma - y mirándolo muy enfadado - Acaso es mentira -

- Zero, yo no quise... -

- Entonces es verdad. La besaste -

- Sí -

Zero cerró sus ojos con mucho dolor, era lógico Yuuki era hermosa, la madre de sus hijos, y lo más importante, mujer.

- Zero, ella se abalanzó sobre mí, yo no pude detenerla -

- No pudiste o no quisiste detenerla -

- Me asusté -

- ¿Te asustaste? ¡Por eso la besaste! -

- Yuuki dijo que pasaba más tiempo contigo que con ella, que parecías mi novio -

- ¿Y eso no es así? -

- Claro que no -

Zero lo miro aún más furioso y sin importarle que el auto estaba en movimiento abrió la puerta e intento bajar de él.

- ¡Estás loco! -

- No, el que hace locuras eres tú. Tú qué besas a mi hermana y le haces creer que tiene una oportunidad contigo -

- Zero, lo hablaré con ella. Le dejaré claro que estoy contigo -

- No es necesario -

- Lo es, basta de mentiras -

- No quiero que ella sufra, solamente no la vuelvas a besar - dice Zero acariciando la barbilla de Kaname

- No lo haré - y luego de un beso húmedo siguió su marcha.

Kaname volvió a poner en marcha su auto y llevo a Zero hasta su casa, sin dejar de besarlo lo llevó hasta su habitación, lo desnudó recorriendo cada centímetro de su cuerpo, Zero gritaba como poseído cada caricia del castaño era para el joven de cabello plateado, un regalo de Dios.

Cuando ambos cayeron rendidos, Kaname acarició los cabellos de plata y sin poder dejar de mirar su pacífico rostro lo besó en la nariz.

- Eres un sueño para cualquiera, lástima que en mi vida no haya lugar para uno de ellos. Siento tantas cosas por ti Zero, pero aún no sé si este sentimiento es amor -

Luego se acomodó a su lado y se quedó profundamente dormido.

Al día siguiente Kaname y Zero llegaban a las siete de la mañana a casa de Yuuki. La mujer en cuanto vio a su hermano sano y salvo se acercó muy molesta y le dio una sonora bofetada.

- ¡Estuve toda la noche en vela! Estaba preocupada, no sabía si algo malo te había pasado o no. Casi llamo a la policía. ¡No respondes ese maldito teléfono! -

- Lo siento, me quedé sin batería - responde Zero bajando la mirada

- ¡Vete a bañar! Apestas a alcohol -

Una vez que Zero se perdió escalas arriba, Yuuki se acercó a Kaname.

- Si perdiste a tu compañero de fiestas, no arrastres a mi hermano. Zero no es como el idiota de Senri -

- Lo sé, y lo siento. No volverá a ocurrir -

- Más te vale que así sea -

Zero obedientemente se bañó y cambio de ropa, tomó su bolso y bajo las escalas en el preciso instante en que Yuuki se aproximaba a los labios de Kaname, pero este la rechazaba, pero no con la suficiente firmeza, porque finalmente terminó cediendo a la mujer.

- Estoy listo - dice Zero interrumpiendo

- Vamos - dice Yuuki quitándole el bolso a Zero

La mujer subió el bolso de su hermano en su auto, luego fue hasta el auto de Kaname, cuando se disponía a subirse en el asiento del copiloto Takuma apareció para detenerla.

- Mamá, tú debes ir con nosotros -

- Zero los llevará a ustedes - responde la mujer a su hijo mayor - Tu papá no conoce el camino, por eso ira conmigo -

- Mamá, Zero aún está bebido, nos vamos a matar con él al volante -

- Taku, estoy bien - dice Zero

- Ves - responde Yuuki

- Ni yo ni mis hermanos nos iremos con Zero - y mirando al peliplateado - No es nada personal, pero creo que deberías ir con papá y nosotros con mamá -

- Yuuki, Takuma tiene razón, deberías ir con los niños, además yo fui el responsable de que Zero no llegara a casa anoche, así que me haré cargo yo de él -

La castaña a regañadientes acepto y se subió a su auto con sus hijos, Kaname la seguía desde cerca en su coche en compañía del peliplateado, que tenía una expresión de enfado que se podía notar a quinientos kilómetros de distancia.

DOCTOR DE CORAZONESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora