Bajo la luz de la luna. Rengoku X Lectora (Pausado)

14. como hojas de otoño

- ¿¡p-por qué lo preguntas!? -

- es que, esta vistiendo la capa de la familia, mi hermano dijo una vez que solo le prestaría su capa a su futura esposa...-

- "¿¡QUÉ QUEEEEEEEÉ!? ¡¡ACEPTO!! SI MALDICIÓN SIIII"- casi aúlla de la felicidad tu omega.

Por tu parte estabas toda roja del rostro, te sentías ultrajada, pensaste que el mayor era inocente pero solo fue una parte de su juego, poco a poco te estaba ganando y no ibas a permitir eso.

- e-el y yo...somos muy buenos amigos...- esto era una obvia mentira.

- ¡p-pero mi hermano siempre me decía que usted le odiaba!-

Meditaste un poco lo que dirías, hasta que te diste cuenta de la gran arma que tenías a tu lado.

- ¿podrías contarme que otras cosas te a dicho tu hermano sobre mi? -

- ¡si! N-no estoy seguro del año, pero cuando mi hermano ya era pilar le fue encargado vigilar a una grupo de cazadores de bajo rango, se decía que era un grupo muy caótico y por eso se lo asignaron, el grupo se movió sin seguir ordenes y casi son asesinados por los demonios, mi hermano iba a ayudar pero en eso llego usted de la nada y termino de un golpe con todos los demonios, mi hermano estaba asombrado, creo que usted estaba a punto de llegar a pilar, por lo que apartir de ese día no dejo de hablarme de usted...-

- ¿d-de verdad? -

- ¡si! Mi hermano decía que usted era muy hermosa y fuerte, que era una omega ejemplar, también decía que usted olía muy ric-

- ¡¡Senjuro hermanito!! ¡te ves casado! ¿¡no quieres ir a dormir!? -

Kyojuro ni siquiera lo pregunto, simplemente tomo a su hermano en brazos mientras le tapaba la boca y se lo llevo hasta la casa.

- entonces desde siempre a tenido estos sentimientos...- susurraste y te mordiste los labios.

Una cálida sensación recorrió tu cuerpo poniéndote los nervios de punta, hiciste memoria sobre esa misión, habías sentido el amor del delta rondar por el lugar pero aun no lo conocías, lo viste por primera vez cuando el patrón te había nombrado pilar de la naturaleza, Kyojuro estuvo ahí sintiéndote, pensaste que talvez lo hacía por cortesía, además de que siempre tenía esa estúpida sonrisa que le hacía ver tan lindo.

Recordaste como lo autoproclamaste tu enemigo cuando te enteraste que era un delta, si de por si ya le aborrecias luego se eso lo hiciste el doble, en las misiones grupales siempre era atento, brindándote comida y agua, pero muchas veces también le rechazaste sin siquiera mirarle a los ojos, creias que ese comportamiento amable era tipo de el, ya que con todos era así, por lo que nunca pensaste que talvez eran sus sentimientos hacía ti.

Y era difícil saberlo ya que ni el mismo se lo explicaba hasta hace unas semanas, todo había cambiado, ahora todo tenía sentido.

Su molestia al verte con los otros alfa, la fascinación que tenía por tu olor, su ansiedad al saber que irías a misiones muy peligrosas sola, el querer tener aunque sea un poco de contacto físico...

- tonto...- te levantaste de tu lugar, dejaste al pato en el pasto y caminaste hacía la casa, aunque toda una fila de animales te iban siguiendo.