Destruyendo Mi Matrimonio (NamJin)

Extra 1/2: Te amo a ti

— Hay que...

Su expresión molesta y dolida me hizo pensar que cambiaría de opinión pero realmente no iba a dar marcha atrás está vez.

No he hablado con él en unos cuantos días, nunca pensé que me sentiría tan angustiado y me dolería el corazón como lo está haciendo ahora.

Lo hice todo mal. 

¿Realmente creyó que podía traicionarlo tan fácilmente?

He vivido todas mis primeras veces con él e incluso si se acabaron, me gusta seguir haciendo las mismas cosas sólo porque está a mi lado.

Lo quiero de regreso pero también deseo respetar su decisión. Demonios, no puedo seguir así.

No he comido, no he podido dormir, soy un muerto andante, buscando su aroma en cualquier parte.

— NamJoon, te sientes bien? — observé al azabache, tenía una expresión preocupada en su rostro.

— has estado distraído toda la mañana, ni siquiera me estás escuchando — sonrió mostrando sus dientes. Pareció divertirle mi falta de atención. Bajé mi vista no queriendo hablar con él. No estaba de ánimo para escucharlo bromear. — no me lo dirás? — cuestionó. Hoy realmente estaba insistente.

— Me duele la cabeza — contesté queriendo que deje de preguntar. Entonces comencé a guardar algunos papeles del escritorio.

— entonces toma unos analgésicos, realmente creí que estabas atravesando un duelo — comentó burlón mientras se levantaba también.

Al abrir uno de los cajones que parecía no querer ceder, utilice demasiada fuerza y el cajón se salió totalmente del mueble, cayendo algunos documentos.

— ¡maldita sea! ¿Es que acaso no puedo evitar romper todo? — tire el maldito cajón contra la pared y me agaché a recojer las cosas.

— ¿No es solo un dolor de cabeza verdad? — preguntó el otro alfa que aún seguía en la oficina. Fue entonces cuando encontré aquel par de escarpines rojos. Era un obsequio pero al final quedó olvidado aquí.

— Lo siento... no lo hice bien —  negué con. La cabeza.

Estaba equivocado, herí a tu padre con todo lo que hice y dejé que pasara. Lo descuidé y lo culpé. Perdón cachorro. Perdóname.

— ¿NamJoon? — me levanté y entonces observé al alfa que se había vuelto más pálido que de costumbre.

— mi esposo quiere divorciarse — las palabras salieron de mi garganta casi  estranguladas.

El alfa se acercó y llevo su mano a mi hombro.

— siéntate NamJoon, siéntate y cuéntame lo que sucedió — su voz sonó suave, tomó un pañuelo del escritorio y me lo dió.

Fue entonces cuando sentí las lágrimas deslizarse por mi rostro.

Nunca fui de contar cosas de mi vida, siempre he sido muy bueno escuchando a los demás. Era confidente de muchas personas pero ellos en realidad no sabían nada de mí.

No he sabido sincerarme, incluso con Jin. Había cosas de las que no hablaba con él. Ahora que lo pienso.

¿Quién soy yo realmente? ¿Soy la persona que me muestro ante Jin o soy la persona que se muestra frente a los demás? ¿Soy el director del hospital o soy el doctor que atiende a sus pacientes? ¿Soy el doctor Kim? ¿el señor Kim? ¿Kim NamJoon? ¿NamJoon? ¿Joon? ¿Quién soy?

¿No soy nadie? ¿Soy alguien?

Tengo miedo, sus miradas me dan miedo, no son sinceros. Yo tampoco lo soy. Me convertí en lo que más temía. Fue la única manera que encontré de defenderme.