Right there | blacktan

Capítulo 9.

Al día siguiente, por sugerencia de Jennie, Roseanne invitó a la doctora Kim, a Seokjin, a la señora Jung y a Hoseok a explorar con ella el laberinto que su padre había mandado construir para ella. Además, y también por sugerencia de Jennie, Roseanne insistió en que Yoongi y Namjoon anduvieran cerca por si alguien se perdía o necesitaba ayuda.

La idea de internarse en un laberinto inspiraba cierta curiosidad a la doctora Kim y a Seokjin, siendo como eran dos enamorados de los acertijos intelectuales. Y, como es natural, Seokjin estaba encantado de participar en cualquier actividad que lo colocara en las inmediaciones de la señorita Park.

La señora Jung y Hoseok recibieron la invitación con menos entusiasmo. A la señora Jung le fastidiaba perderse aunque solo fuera una hora de sol directo y, en lo relativo a Hoseok, el evento le impediría llevar a cabo su sesión regular de entrenamiento. Sin embargo, la señora Jung consideró que la excursión ofrecería una oportunidad de que Hoseok y la señorita Park se conocieran mejor, y el muchacho, por su parte, mostro mucho más interés cuando descubrió que Namjoon estaría presente.

Namjoon se moría de la preocupación pensando que cundiría el caos en el centro vacacional si desviaba por un momento su atenta mirada, pero no podía dejar de atender la sugerencia de la señorita Park.

—Gracias a todos por venir —empezó Roseanne cuando sus invitados se reunieron en la entrada sur del laberinto. Los obsequió con una sonrisa que, de haber sido adecuadamente registrada y documentada, podría haber entrado en el Libro Guinness de los Récords como la más vivaracha jamás exhibida—. ¡Que empiece la aventura!

—¿Vamos a proceder siguiendo una estrategia en concreto? —preguntó la doctora, que era una amante de los planes, las estrategias y los horarios.

—Me alegro de que me haga esa pregunta, doctora —fue la respuesta de Roseanne—. Sí, no podemos internarnos en un laberinto todos en masa, así que nos separaremos en grupos. Hay varias entradas. La señora Jung, Hoseok y yo, acompañados de Jennie, entraremos por la puerta sur. La doctora Kim y Seokjin, acompañados de Yoongi y de Namjoon, accederán por la puerta oeste. Nos encontraremos en el centro del laberinto, que cuenta con una hermosa fuente y con un delicioso almuerzo ya preparado para nosotros. ¿No les parece maravilloso?

—¡Desde luego que sí! —exclamó la señora Jung, que estaba muy contenta de que Hoseok y la señorita Park fueran a pasar tanto tiempo juntos. Tal vez se prendieran una chispa o dos.

Las otras reacciones de entusiasmo fueron algo más forzadas. Seokjin se llevó una decepción al saber que no estaría en el grupo de Roseanne, y lo mismo le sucedió a Hoseok, que se había hecho ilusiones de pasar un rato con Namjoon.

—¡Maravilloso! —exclamó Roseanne—. Pues empecemos. Y procuren no perderse. Sería una pena que no pudiéramos disfrutar del almuerzo.

De modo que se formaron los grupos y todos accedieron al mismo tiempo por entradas distintas. Lo que Jennie y Yoongi no le dijeron a nadie fue que Jungkook ya se encontraba en el interior del laberinto, aguardando la señal.

🌻

Hay laberintos de setos que son poco más que jardines maravillosos, y hay laberintos de verdad, de setos impenetrables que alcanzan los tres metros de altura. Aquellos que no conocían a Roseanne se habrían sorprendido al descubrir que sentía auténtica pasión por los laberintos. No solo había solicitado su construcción, sino que lo había diseñado ella misma. Sin embargo, de eso hacía un año. Era consciente de que tal vez no recordase cada encrucijada y revuelta, así que quiso llevar consigo los planos, por si acaso alguno de sus invitados se perdía y tenía que ser rescatado. Sin embargo, no pudo encontrarlos. Jennie le había asegurado que aparecerían antes o después y que, en lo concerniente a ese día, estaba segura de que Roseanne sabría encontrar el camino de memoria.
Y su confianza en Roseanne no flaqueó, ni siquiera cuando la señora Jung y Hoseok reunieron sobradas muestras de que la hija del propietario del hotel tenía una pésima memoria.