Rin.
— ¡Hey!— Voltee para saber quien me había llamado, era Senju.
— ¿Que haces aquí? Estas muy lejos de tu casa.
No me respondió, en cambio trato de darme un puñetazo el cual detuve antes de que me diera.
— ¿Que pretendes con esto Senju?
— No permitiré que me quites la ilusión de fundar Brahman.— Trato de darme con su mano libre pero también la atrape.
Doble un poco sus muñecas para debilitarla, ante esto soltó un quejido, la empuje con fuerza haciendo que perdiera el equilibrio y se fuera al piso de culo.
— Vete a casa Senju.— Le di la espalda, sabiendo que vendría a atacarme a traición me movi rápido para esquivarla.— Atacar de esa manera tan deliberada no es propia de alguien digno de pelear conmigo Senju, lo sabes.
— Estoy harta de ti.— Se puso de pie mirándome a los ojos.— Regresas después de casi ocho años y quieres venir a dar ordenes a todos como si te pertenecieran.
— A que quieres llegar con esto.
— Aunque estos sean tus territorios, para la gente no lo son. Infundir miedo para que hagan lo que quieres no te funcionará, ¿No te has puesto a pensar en eso?
— ¿Y tu no te has puesto a pensar en que por hablar estupideces puedes terminar con la lengua cortada?— Retrocedió con precaución.
— Aunque trates de terminar con todas las pandillas, siempre habrá alguien diferente, alguien que se oponga a eso.
— Tu no eres ese alguien, eres demasiado cobarde como para tratar de retarme.
— No lo soy.— Apretos sus puños, suspire cansada ya de esta conversación.
— Ve a casa Senju, no vale la pena hacerte matar.
Esta vez si pude irme sin problemas, a pesar de que ella estuviera tan molesta, si tenía razón en algo, pero no tenía el tiempo de echarle cabeza a eso y echarme a morir.
En la entrada de la casa estaba Takemichi, me extraño verlo allí. En cuanto se percató de que me estaba acercando acortó la distancia y me abrazó como si tuviera años sin verme. Lo escuché sollozar.
— ¿Te encuentras bien amigo?— Pregunte sobando su espalda.
— Si, lo siento.— Se separo limpiando sus lágrimas.— Me alegra mucho verte.
— Si te vas a poner así cada vez que duremos días sin hablar entonces tendremos que vernos más seguido.— Dije a modo de broma, pero no le causó gracia.— ¿Seguro que estas bien?
— Necesito que hablemos sobre la pelea que habrá.— Asenti y lo deje entrar para que habláramos con más comodidad.
Cerré la puerta del despacho con seguro para que Ran y Rindou no entraran, no me gustaba que se encontraran con Takemichi. Se que tratarían de involucrarlo con RedS y no quería eso.
— Bien, te escucho.— Me senté tras el escritorio con el del otro lado.
— Quiero pedirte que no participes en la pelea contra Valhalla.— Aquella petición me había dejado confundida.— No puedo decirte bien como, pero algo malo va a pasarles en esa pelea. Morirás. Tu, Baji y Kazutora.
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Una Promesa [Tokyo Revengers X Oc]
FanfictionVolver después de tanto tiempo, con una mentalidad tan diferente a la que tenía cuando me fui hizo que tuviera un choque con la realidad. Me preguntaba, ¿Como esa pandilla se mantenía a flote? Según ellos solo estaban juntos para cuidar de sus amigo...