Rin.
Días atrás había tenido una conversación con Takemichi, la cual no había salido muy bien.
— Yo vengo del futuro.
Mientras escuchaba toda la historia mi mente estaba llenándose de rabia y confusión, cuando terminó de hablar explote.
— Lárgate de mi casa, lunático.
— Es la verdad Rin, te estoy siendo sincero.
— ¡Que te largues!— Saque el arma debajo del escritorio y le apunte.— ¡No permitiré que andes diciendo mariqueras sobre mi muerte y la de Katzui! Lárgate.
— Rin por favor cálmate.— No hice caso y dispare entre sus pies haciendo que pegara un brinco.
— ¡Vete antes de que te mate porque la próxima bala va a tu cabeza!
No dudo dos veces antes de correr a la puerta y salir corriendo de la casa.
No habíamos hablado desde entonces, admito que mi reacción no fue la mejor, pero que viniera con esas bromas me encabrono demasiado.
— Ya están todos listos.— Me aviso Kat, salí al estacionamiento de RedS, observando a los capitanes.
— Megumi y su división.
— ¡RedS!— Gritaron los cincuenta miembros y su capitán.
— Nanami y las cuarenta ofrendas.
— ¡RedS!— Gritaron las chicas de Nanami junto a ella.
— Miyamoto y sus veinte hombres.
— ¡RedS!— Las voces gruesas de los veteranos de la generación de mis hermanos se escucharon fuertes y seguras.
— Tato y los veinte desalmados.
— ¡RedS!— Los mercenarios de Tato estaban completos.
— Tunay y los salvadores.
— ¡RedS!— Gritaron los 20 miembros y su capitán.
— Estamos completos los 150 miembros que le he ofrecido a ToMan para pelear contra Valhalla. Saben como son ellos.— Al decir eso se escucho como abucheban.— Estamos a la par, trescientos y trescientos, a pesar de eso tenemos la ventaja, estamos nosotros, podemos ganar sin trucos sucios. Fue la condición que puso Mikey.
— Solo los capitanes y nosotras portaremos armamento.— Dijo Katzui entregándoles las armas a los cinco capitanes.— Ya tienen claro como y cuando usarlo.
— ¡Si señora!
— Antes de irnos, quiero decir algo.— Hicieron silencio, dándome la libertad de hablar.— Esta será la primera pelea oficial que habrá desde que volví, y aunque vamos en apoyo de otra pandilla, esta pelea también es nuestra. Aunque no es como están acostumbrados a hacer las cosas, quiero que ganen y que toda la ciudad y ustedes mismos recuerden esta victoria como nuestra.
Estallaron en aplausos y silbidos en señal de apoyo a mis palabras, estaban preparados para ganar y lo sabían.
Subimos a las camionetas y motocicletas, pitando para avisar que estábamos camino a la pelea.
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Una Promesa [Tokyo Revengers X Oc]
FanfictionVolver después de tanto tiempo, con una mentalidad tan diferente a la que tenía cuando me fui hizo que tuviera un choque con la realidad. Me preguntaba, ¿Como esa pandilla se mantenía a flote? Según ellos solo estaban juntos para cuidar de sus amigo...