Ágata Russo y Matt Czuchry no sabían que el destino los uniría en una aventura llena de amor, traición y dolor.
Dos mundos diferentes:
-Ella: llena de sueños, esperanza, estudiante, trabajadora y a pesar de las decepciones aún cree poder encontrar e...
Ahora estoy desayunando junto a Gian, resulta que es un buen cocinero y hace unos excelentes panqueques, mis favoritos. Terminamos y decido recoger los platos para ponerme a fregar.
Gian fue a darse una ducha mientras yo recojo un poco.
—Me tengo que ir Aga, debo ir al hotel a firmar unos documentos, quiero que sepas que fue la mejor noche de mi vida, me encanto desayunar a tu lado.
—Está bien, también pase una excelente noche, el desayuno estuvo delicioso. Podrías venir a cocinarme diario y ser mi chef personal.
—Puedo hacerlo.
—Solo es broma.
—Adiós, nos vemos mañana.
—Bye.
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Llegue a la empresa, bajo del taxi, antes de verificar que se realizó el pago, entro y como siempre doy los buenos días. Cuando llego a mi oficina, ahí está mi jefe sentado en mi escritorio, que extraño si hoy llegue más temprano que nunca, veo como se me queda mirando de arriba abajo y decido saludarlo.
—Buenos Días Señor Czuchry.
—Buenos Días Ágata, estas muy bella. Me gusta ese vestido, le queda muy bien.
—Gracias.
NO daré mi brazo a torcer con Matt, hoy soy una nueva persona, sin miedos, dispuesta a darse una oportunidad en el amor y eso no pasara con Matt. Repito en mi mente este mantra.
—Ágata, imagino que tus vacaciones fueron buenas.
—Sí, descanse mucho.
Veo como se me acerca e intenta besarme, lo paro y quito su mano encima de mí.
—No Matt, Mantén la distancia.
—Sé que nos gustamos, no te resistas. Podemos intentar tener algo. — Ahora él quiere intentar algo, ya cuando no se puede.
—No quiero y además estoy saliendo con alguien.
—Pensé que me querías a mí, pensé mal. Además después de lo que hicimos esa noche, me estás diciendo que estabas con ese fulano en ese tiempo.
—No confundas las cosas, en ese tiempo, estaba sola. Pero he decidido darme una oportunidad con alguien y ser feliz.
—Okay, ordena tus cosas y pasa a mi oficina para nuestra reunión.
Sale furioso de mi oficina, entiendo su punto, pero no puedo estar con él. Ahora tengo a Gian que aunque es nuevo lo de nosotros, él está dispuesto a más y me respeta como mujer, no solo piensa en sexo.
Fui a la oficina de Matt y acordamos su agenda de hoy. Tengo mucho trabajo me la he pasado ordenando, agendando reuniones, cogiendo llamadas, de aquí para allá, estoy tan sumida en mi trabajo que no me doy cuenta que ya paso mi hora de comida, me di cuenta porque mi celular comenzó a sonar, deslizo para coger la llamada.
