Capítulo XXI COMPROMISO Y BODA

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Hoy Matt me invito a cenar, Salí más temprano para ir al salón y prepararme para la noche, estoy paseando por un centro comercial, vi unos zapatos bien lindos así que entre a comprarlos. Minutos después salgo con una bolsa de compra, voy a mi auto y me dirijo a casa, ya que había terminado de todo.

Cuando llego ya son las 7 de la noche, comienzo arreglarme ya que la cita es las 8:30 de esta noche. Me maquillo, me pongo un vestido corto, color negro, el cual se ajusta a mi cintura.

Al terminar, le mando un mensaje a Matt, diciendo que termine.

Ya estamos en un restaurante, la comida es deliciosa y el ambiente espectacular

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Ya estamos en un restaurante, la comida es deliciosa y el ambiente espectacular. Comimos, pedimos un postre y después Matt comienza a decirme...

—Ágata, eres el amor de mi vida. Te amo con mi alma, en estos meses que la pase contigo fueron maravillosos. Por eso quiero pedirte que seas mi esposa.

—Sí. — Me paro y me siento encima de él, estoy tan feliz que no pienso en las personas a nuestro alrededor.

—El anillo lo compraremos juntos.

—Dios no lo puedo creer, me haces la mujer más feliz.

 Estamos organizando nuestra boda, en estos días la hemos pasado Matt y yo con muchas cosas

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Estamos organizando nuestra boda, en estos días la hemos pasado Matt y yo con muchas cosas. Ambos decidimos que la boda seria en la playa, algo sencillo. Una organizadora de bodas nos está ayudando, pero aun así Matt está pendiente de todos los detalles. Hoy me estoy probando vestidos, uno llamo mi total atención.

Así pasaron los días y ya había llegado el día de la boda, estoy parada en el altar con Matt a mi lado.

— ¿venís a contraer matrimonio sin ser coaccionados, libre y voluntariamente? — Nos pregunta el sacerdote.

—Sí, venimos libremente. —Decimos.

— ¿Estáis decididos a amaros y respetaros mutuamente, siguiendo el modo de vida propio del Matrimonio, durante toda la vida?

—Sí, estamos decididos.

El sacerdote sigue con la ceremonia, ambos unen su mano derecha y dicen:

Matt:

Yo te quiero a ti Ágata, como esposa, me entrego a ti, prometo serte fiel
en la prosperidad y en la adversidad, en la salud y en la enfermedad y así amarte y respetarte todos los días de mi vida.

Ágata:

Yo te quiero a ti Matt, como esposo, me entrego a ti y prometo serte fiel
en la prosperidad, en la adversidad, en la salud y en la enfermedad,
y así amarte y respetarte todos los días de mi vida.

El sacerdote dice: — Tu Matt ¿quieres recibir a Ágata como esposa y prometes serle fiel, en la prosperidad y en la adversidad, en la salud y en la enfermedad, y, así, amarla y respetarla todos los días de tu vida?

—Sí, quiero.

Tu Ágata ¿quieres recibir a Matt como esposo, y prometes serle fiel
en la prosperidad y en la adversidad, en la salud y en la enfermedad,
y, así, amarlo y respetarlo todos los días de tu vida?

—Sí, quiero.

El sacerdote prosigue diciendo:

—El Señor confirme con su bondad este consentimiento vuestro que habéis manifestado ente la Iglesia y os otorgue su copiosa bendición. Lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre.

—Estos anillos que vais a entregaros uno al otro en señal de amor y de fidelidad.

Matt pone el anillo a  Ágata diciendo: recibe esta alianza, en señal de mi amor y fidelidad a ti. Pone el anillo a Matt diciendo: —recibe esta alianza, en señal de mi amor y fidelidad a ti. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

—Novio puede besar a la novia.

Después de la ceremonia nos fuimos al lugar donde se iba a realizar la fiesta, estoy impresionada con la decoración del lugar, me siento tan feliz.

—Amada esposa ¿Me permite este baile? — pregunta Matt.

—Sí, amado esposo. — Vamos a la pista de baile y comenzamos a bailar.

—Amor estoy feliz de que seas mi esposa.

—Yo también esposo mío.

Cuando termina la canción nos vamos a sentar, pasamos una bonita velada.

—Amor vámonos.

—Matt aún no termina.

—Escapémonos, quiero quitarte ese vestido.

—Vámonos entonces.

Matt y yo nos quedamos en un hotel, al otro día nos tocaba partir a nuestra luna de miel. Aun me pasan los flashback de la noche del día de nuestra boda:

Matt me quita el vestido lentamente, debajo traía puesta una linda lencería totalmente en blanco, el me besa con pasión, me levanta por la cintura, yo me sujeto con los pies enredados en su cintura, el aparta un poco mi pelo y pasa su lengua por mi cuello y mi clavícula.

—Ágata me vuelves loco.

—Matt sigue.

Conmigo encima de él, camina hasta la cama la cual está llena de rosas rojas, me deja acostada, mientras él se comienza a desnudar, queda solo en bóxer.

— ¿Te gusta lo que ves?

—Sí, mucho. —siento la cara caliente y mis mejillas sonrojadas, hasta yo me sorprendo de mi atrevimiento.

—Pues te daré lo que te gusta.

Matt se quita el bóxer y yo aún a esta altura me sorprendo de tamaño de su pene, tan erecto. Trago saliva de solo pensar que eso entrara todo en mí. El quita mi braga, estoy tan expuesta a él, con mis piernas abiertas.

—Me encanta que abras las piernas para mí. —Yo no respondo de lo excitada que estoy.

El besa todo mi cuerpo, pasa su lengua por mi ombligo, baja directamente a mi coño, su lengua hace estragos en mi vagina, siento frio y al mirar me doy cuenta que él tiene un hielo en su boca, este hombre me dejara loca.

Me chupa, muerde, de momento entra un dedo en mí, se siente tan rico.

—Matt entra otro.

El me obedece, con los dos dedos comienza a sacarlo y entrarlo, mientras va chupando mi clítoris, siento como me tiemblan las piernas, una sensación de calor invade mi cuerpo, así tengo un orgasmo en la boca del hombre que amo.

—Saben ricos tus fluidos.

—Matt eso fue súper.

—Lo sé. Déjame decirte que aún estamos comenzando—Cuando él dice eso me entra su pene erecto, de tan mojada que estoy, no siento dolor.

Matt me penetra con rudeza, devora mi boca, agarra mis caderas, se mueve dentro de mí.

—Matt quiero más duro.

—Lo que tú quieras. — Ágata me tienes loco, tan apretada que sacas la fiera que llevo dentro.

Abro más mis piernas y eso lo excita más, estoy llegando de nuevo al clímax. Matt se tensa y se mueve más rápido, sé que él también está al extremo, ambos nos venimos al mismo tiempo.

Entre Amor & OdioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora