Capítulo 16

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Narra Jughead

Betty y sus amigas caminaban por los pasillos, recibiendo saludos y miradas de todos, las abejas reinas, eso no lo sabía. Mi mirada se cruzó con la de Betty, pero ella la apartó rápidamente. Eso se me hizo raro, no entendí su nerviosismo hasta que una notificación llegó a su celular y, en cuanto la vio, desapareció por la escuela.

X: Hola guapo -Una chica me interrumpió de mis pensamientos, sin embargo, tuve la odiosa necesidad de seguir a la rubia, así que ignoré a la que me habló.

Vi que ella caminaba por unos callejones poco transitados y llevaba un ¿palo? En verdad temía a las calles, entonces sucedió algo muy inesperado, un sujeto al que no había visto antes se acercó a ella.

Betty pareció temerle, pero reconocerle. Agachó la cabeza en lo que el hombre caucásico la tomaba del brazo y parecía enojado con ella. Noté sus nudillos blancos (para los que no saben, eso sucede cuando alguien aplica mucha fuerza sobre algo) en torno al brazo de Betty, quien empezaba a tener los ojos rojos y llorosos. Iba a intervenir, pero por la calle pasó alguien y el hombre se separó y se fue, sin más.

La rubia se echó contra la pared y pasó sus manos por su cara, entonces me acerqué a ella.

J: ¿Este es tu secreto oscuro, protagonista? -Cuestioné y ella, que aún no se había dado cuenta de mi presenta, se exaltó.

B: ¿Qué? -Dijo con la voz quebrada.

J: Ey -Me acerqué más- ¿Estás bien? -No alcanzó a contestar porque se desmayó, la atrapé antes de que golpeara el piso y, en cuanto la tuve segura, me apresuré a marcar a, ¿a quién? ¿Verónica? No tenía su número. ¿Archie? Opción factible.

En la llamada

J: ¿Archie?

A: ¿Qué pasa Jughead? Me agarras ocupado, estoy con Verónica.

J: Es Betty.

A: ¿Qué le pasa?

J: Se desmayó y no tengo idea que hacer, ¿la llevo a un hospital?

A: ¡No! ¡Tráela al departamento!

J: Voy en camino

Fin de la llamada.

Mientras intentaba cargar a Betty, lo cual fue muy fácil debido a que casi no pesaba, me di cuenta de que Archie habló como si Betty ya se hubiera desmayado antes. Llegué al departamento rápidamente, ya que prácticamente corrí. Me encontré con Archie en la puerta, abierta, esperándome.

A: Déjala en el sofá -Sonaba más tranquilo que en la llamada, le hice caso y vi que todo su grupo de amigas estaba allí. La dejé recostada y suspiré. Creí que llamarían a alguien de seguridad del edificio, pero al parecer todos sabían su papel. Verónica fue a la cocina por agua, Cheryl fue por un medicamento, según oí, y Toni fue por alcohol que olía muy fuerte.

J: Disculpen, ¿qué está pasando? -Pregunté, perplejo.

T: Posiblemente no ha comido -Dijo mientras abría el alcohol y lo pasaba por la nariz de Betty. ¿Tiene problemas alimentarios?

La rubia despertó unos segundos después de lo que hizo Toni, miró a su alrededor con perplejidad y luego me miró a mí.

Verónica le extendió el agua y las pastillas que pude observar tenían inscripto Elizabeth Cooper, ella las tomó sin decir ninguna palabra y luego se incorporó en el sofá.

C: ¿De qué hablamos, rubia? -Ella respondió con una mueca y se levantó del sillón, dirigiéndose a la cocina.

J: Oye -La seguí, pero me ignoró- ¿Qué pasa?

B: ¿Por qué no te vas? -Me miró irritada.

J: Porque necesito saber que atormenta a la protagonista y liberarla de eso, es mi labor como el chico de la chaqueta -Eso le provocó una risa que, aunque se notó que quiso evitar, le salió espontánea.

B: Idiota -Murmuró.

J: Te duele la cabeza, ¿cierto?

B: Sí, a las protagonistas no les duele la cabeza. Entonces te equivocaste, vete a buscar a otra que se desmaye -Sonreí ante su comentario y nos quedamos en silencio.

T: Yo tampoco entendí -Entonces escuché que el resto murmuraba, hablando entre sí, mientras nos miraban.

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