Katsuki nunca quizo hacerle daño, más su reputación se le era importante, asi que no tuvo mejor idea que dejar al pecoso hacer lo que el quisiera, con tal de optener su perdon y quien sabe... Algo más.
Izuku nunca tuvo resentimiento hacia katsuki...
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— Hay, kats.
— ¿Qué quieres?.
— ¿Es c-cierto lo que dicen?...
— ¿Ah?, ¿de que mierda hablas?.
— ¿No lo has escuchado?... B-bueno, muchos hablan de que Midoriya y tu son pareja... Ya que siempre están juntos, almuerzan juntos, entrenan juntos, y...
— ¿Y?...
Se aclara la garganta, desviando la mirada hacia algún lado que no sean aquellos ojos que lo miraban furiosos — Denki me contó que vio marcas en tu cuerpo... Ya sabes, ese tipo de marcas...
— Es porque entreno mucho — respondió volviendo su vista al libro que leía mientras su profesor dormía.
— N-no!, Hanta también las vio en Midoriya, e-es obvio que ustedes dos son pareja...
— Tsk, tu mismo lo dijiste hace un momento, "entrenamos juntos", es normal que tengamos ese tipo de marcas — dio una última mirada al pelirrojo, dando a entender que ahí terminaba la conversación.
— Bien... — Eijiro se dio la vuelta, volviendo a hacer la tarea que les había dejado su profesor, tarea que katsuki había terminado en tiempo récord.
Katsuki miró sobre su hombro al peliverde que estaba junto a su grupo de "amigos", charlando animadamente, este que al parecer sintió su intensa mirada volteo a verlo también. Izuku sonrió y le hizo unas señas con sus dedos, algo que no pasó desapercibido por tres chicos. Katsuki entendió el mensaje, cerró su libro, se levantó y se encaminó hacia la salida, pasando por alto al durmiente profesor.
— Lo siento chicos, volveré en seguida — se despidió. Camino a pasos tranquilos, dirigió su mirada hacia los tres chicos que lo miraban fijamente y les regalo una sonrisa, una no tan amable y alegre que digamos.
Cuando no hubo rastro alguno de los dos chicos, Denki, Hanta y Mina corrieron donde se encontraba el pelirrojo.
— ¿Vieron eso? — preguntó Denki, tratando de no gritar y llamar la atención.
— No, ¿Qué sucedió? — Eijiro estaba perdido, no sabía de lo que hablaban.
— Eiji — fue el turno de hablar de Mina — creo que... Creo que deberías de olvidar a Bakugou...
— ¿Uh?... ¿Por qué? — Dejo de lado su cuaderno, moviendo de manera nerviosa el lápiz que traía en mano.
— Bro... Bakugou se acaba de ir con Midoriya... Y solo porque este le hizo unas extrañas señas — comentó Hanta, mirando con algo de pena a su amigo.
