Katsuki nunca quizo hacerle daño, más su reputación se le era importante, asi que no tuvo mejor idea que dejar al pecoso hacer lo que el quisiera, con tal de optener su perdon y quien sabe... Algo más.
Izuku nunca tuvo resentimiento hacia katsuki...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Días después de la infantil pelea provocada por la chica pelirosa, Katsuki tuvo que ir a hacer unas pruebas. Eran simples, un entrenamiento básico por así decirlo.
En medio de ese entrenamiento tuvo problemas, y todo por un chico que no supo controlar su quirk.
— Kacchan!♡~.
— Mierda...
. . . . . . . . . . .
— Entonces un estudiante no pudo controlar su quirk, este abrió un portal y de ahí cayó este umn... ¿Midoriya?... — frotó el puente de su nariz soltando un cansado suspiro. — ¿acaso no se cansan de meterse en problemas?.
— Si, y no dejó de abrazarme desde que me vio — detrás suyo estaba el, ahora más alto, peliverde. Abrazaba al cansado y frustrado rubio por su cintura, restregando su rostro en la sedosa cabellera rubia — Maldita sea, ¡ya suéltame!.
— Parece que Deku-kun del ¿futuro?, también está obsesionado con Bakugou-kun — murmuró la castaña, viendo con algo de miedo a su peliverde compañero — Umm Deku-kun, ¿Estas bien? — preguntó con una sonrisa nerviosa.
— Si... Uraraka-San, ¿por qué la pregunta? — su "angelical" sonrisa seguía plasmada en su rostro, sin duda no estaba bien.
— ¿Será por que tú pobre lápiz está partido a la mitad? — habló el bicolor, ocultando la risa que amenazaba con salir al ver a su amigo celoso de si mismo.
— Es el estrés — murmuró. Miraba fijamente a su versión adulta, sabía que algo no andaba bien.
Al parecer su versión futura noto su intensa mirada, dejó de restregarse en la cabellera rubia y se fijo en su versión pasada. Al cruzar miradas ambos se tensaron y crearon un ambiente incómodo y sofocante, poniendo nerviosos a la mayoría de los estudiantes. Katsuki al sentir aquel tenso ambiente y la guerra de miradas que se desataba en esos dos problemáticos peliverdes, acarició la mano pecosa que yacía en su cintura, llamando la atención al mayor, este sonrió y dejó de tratar de matar con la mirada a su versión pasada.
— Bien... Deku... Del futuro, te quedaras quieto en esa esquina mientras el director Nezu resuelve tu situación — el cansancio en su voz era notorio, por lo que el peliverde hizo caso sin ninguna queja de por medio.
— Los demás sigan con sus deberes y yo... Yo tomaré una siesta — volvió a acomodarse en su típico saco de dormir amarillo, cayendo dormido al instante.
Katsuki por otro lado, dejó al peliverde irse a la esquina, y después se encaminó a su pupitre.
Izuku quién no le había prestado atención al rubio, volteo para mirar nuevamente a su versión futura. Luego volvió su vista a su sensei, viendo que este estaba profundamente dormido, así que sin pensarlo mucho se levantó y camino hacia el mayor.