Estaba por ponerse el sol, así que Yoongi llevó a Jimin a casa, se despidieron con un casto beso y cerró la puerta, Jimin gritó para decirle a sus padres que había llegado, pero al no oír respuesta se dirigió a la cocina y encontró una nota, la había dejado su madre.
"Jimin, tu padre fue a su trabajo de urgencia y no volverá hasta las ocho, yo fui por comida, la despensa quedó vacía, espero que te hayas divertido con Yoongi, volveré pronto, te quiero pequeño"
Jimin después de eso se recostó un momento en el sofá, venía demasiado cansado, al rato se escuchó el timbre de casa, supuso que era Yoongi que tal vez se olvidó de algo, abrió la puerta y se encontró con Hoseok. Lo invitó a pasar y estuvieron hablando un buen rato de cosas triviales, la relación de Hoseok y Jimin es de unos amigos muy cercanos, se conocieron hace seis años, encajaron desde el principio, Hobi estaba interesado en entrar a un curso de baile callejero y hip hop en una academia, y Jimin quería inscribirse en un curso de baile contemporáneo, justo en la misma academia que Hoseok, que coincidencia.
Se podría decir que el baile los unió, y se han vuelto de los amigos más inseparables que se pueda encontrar, obviamente sin que Hoseok deje de lado a Yoongi.- Y dime, ¿Como van los planes de la boda?
- Un poco complicados Hobi, el hecho de que el padre de Yoongi no quiera firmar los papeles lo hace muy difícil.
- ¿Si lo amenazamos para que los firme?, no es mala mi idea. -dijo en tono de burla
- Es lo que le dije a Yoongi, ha, sabía que no estaba loco.
Se empezaron a reír, compartir momentos los dos les encantaba, Hoseok veía a Jimin como alguien maravilloso, lleno de vida y alegría. Entre tanta plática salió el tema del que Hobi no quiere hablar con nadie.
- Hobi, ¿Cómo es tu tipo ideal de pareja?
- ¿A qué viene la pregunta?
- Simple curiosidad, y de verdad quiero saber.
- Es un secreto para mí.
- ¿No confías en mí?
- Claro que sí, pero eso prefiero guardármelo para mí solo, ni siquiera Yoongi lo sabe.
- Entonces imaginaré tu tipo.
- ¿Me conoces lo suficiente acaso? - preguntó retador
- Se mucho de ti, digo, no tanto como Yoongi pero si se mucho de ti - dijo entre risitas.
-Bien... ¿Qué tienes en mente?
- Veamos, una chica con cabello largo, sedoso y rubio.
¿Por qué necesariamente una chica? Se preguntaba el mayor.
- De alta estatura - continuó Jimin- claro, no más alta que tú pero si alta, que vista de blanco mayormente, amable, dócil, sencilla, de rasgos finos y una personalidad tierna y gentil.
- Lamento informarle al doncel Jimin que se equivocó en todo lo que dijo- comentó Hoseok burlón.
- Entonces ¿el caballero Hoseok me está confirmando que no le atiné a ninguna suposición? -respondió Jimin riendo.
- A todo esto, ¿Cuál es el afán de conseguirme a alguien?
- No me digas que no te quieres enamorar.
- Quiero, pero no estoy tan a prisa a fijarme en alguien, y hasta sierto punto no me interesa.
- Oh, ya sé que pasa aqui.
- ¿Qué es lo que crees que pasa?
- ... Te gustan los chicos verdad.
Y se quedó mudo, pálido, no debería, de hecho, era normal, a sus dos amigos les gustaban los hombres, ¿Por qué avergonzarse? Aun así, no tenía el valor de decirle que le gustaba un hombre en efecto, simplemente estaba mal que le gustara, no por ser un hombre, sino por ser "el" hombre. Si fuera alguien más, se lo diría sin problemas.
- Claro que no, me gustan las mujeres, pero mochi ¿Crees que voy a escoger a una de mis pretendientes a pesar de saber que mi dinero es lo único que les importa?
- Tranquilo, era una suposición, pero tienes razón, tu sigue esperando a tu ser especial.
- Créeme, había llegado hace mucho tiempo, pero jamás pude llamar su atención.
- No preguntare su nombre, de acuerdo, no te atormentaré más, mejor hablemos del futuro.
-...
-...
-...
- ¿En tu futuro ya vez a tu chica ideal?
- Jimin, no ayudas - comentó riéndo.
Y se pudo decir que, si imaginó su futuro con su ser ideal, con el hombre que siempre amó, pero no lo vio como meta de vida, sino como una ilusión falsa, algo que jamás pasará no importa cuantas veces se lo pida a las estrellas, sin importar todas las veces que sus ojos se cierren y lo desee desde el fondo de su alma, nada podía cumplir su petición, solo lo tocaba conformarse con lo que tenía, juraba y prometía que lo iba a olvidar de uno o de otro modo.
Tenía algo en claro, enamorarse no fue hecho para él, solo lo quieren por su dinero, y la única persona que logró enamorarlo simplemente no podrá estar en su futuro, tristemente, a pesar de lograr olvidar a esa persona, Hoseok siente que no se podrá enamorar más, y después de la pregunta del futuro, solo pudo imaginarse a él vestido de traje negro en una iglesia, pero el siempre siendo el padrino y jamás el novio, todo lo que le ha pasado ha sido tan injusto, una persona tan dulce como el recibe tal trato de la vida.
- Mejor platícame de tu boda.
- Oh, si, bien pues Yoongi ha estado muy ocupado consiguiendo un salón de fiestas.
- Solo dile que no se desespere tanto.
- Dice que le encantaría que fuera el mejor de todos, porque nuestra boda debe ser perfecta, porque merezco lo mejor, ¿No es tierno? - suspiraba al hablar.
Como le dolía escuchar eso, pero ese era el precio de enamorarse del hombre que ya le pertenece a alguien más.
- Jimin, perdón por preguntar, pero, antes de Yoongi ¿Te has enamorado?
- Bueno, todos tenemos nuestro pasado, y puedo decirte que sí, yo me enamoré de alguien hace mucho tiempo, pero fue algo que me dolió por un tiempo.
- ¿Te lastimó?
- Si, me enamoré de una mujer, que ante mis ojos era perfecta, piel de porcelana, cabellos rizados, un mismísimo ángel al que todos les gustaba contemplar, por fuera era ese su aspecto, pero por dentro más que un ángel era uno caído, tantos meses se dedicó a hacerme creer que me amaba, para luego encontrarla a lado de un poste de luz burlándose de mi junto a su amante, diciendo que pronto me sacaría todo el dinero que pueda.
- Perdón Jimin, no tenía que haber preguntado.
- No, está bien, es algo que pasó hace mucho, ahora tengo a Yoongi y es todo lo que necesito.
Y de nuevo ese dolor en su pecho.
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ℜ𝔢𝔪𝔢𝔪𝔟𝔢𝔯 𝔪𝔢, 𝔭𝔩𝔢𝔞𝔰𝔢... [𝐘𝐌]
FanfictionYoongi los amaba, tenía a su hermoso esposo, al que le había jurado una vida llena de amor y cero engaños, y tenía a su linda amante, a la que le había jurado amarla para siempre. - Querido Jimin, el que llenaba mis días de alegría, el que jugaba c...