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๑¿Recuerdas?๑

-Esta clase y te enseño a tocar el piano, ¿si?

-Claro que sí, hyung. -Contestó entusiasmado el menor mientras le regalaba una dulce sonrisa.

A los 15 minutos sonó la campana, en señal de que ya había terminado la clase.

-En una semana es tu cumpleaños, Jeon.¿Qué piensas hacer? -Preguntó el más pálido.

-No lo sé, cumplo 17 años, podrías darme alguna idea o algo.

-Odio las fiestas, no puedo ayudarte mucho en eso. -Mientras ambos conversaban se acercaban a la sala de música.

-Llegamos.

-Increíble. -Este dejó su mochila junto a una de las sillas, y se sentó a tocar una bella melodía en el piano.

El menor solo se sentó a su lado para mirarlo de la manera más embobada posible, a lo que el mayor solo sonrió de forma tierna.

-Debes intentarlo, dame tu mano.

Min extendió la mano para así este correspondiera, y así poder enseñarle.

-¡Suena muy lindo! -Dijo el menor con un lindo brillo en sus ojos.

-Claro que sí. -Este se levantó de su puesto para colocarse desde otro ángulo para poder mirar al menor.

Era una escena muy cliché, pero de tranquilidad para ambos, solo sonaba el lindo sonido que provenía solo del piano y nada más. Min se enamoraba cada vez más de Jeon, Y Jeon también de Min, era mutuo y lindo.

-Sé que apenas aprendas, tocarás demasiado lindo. -Dijo Min mientras se acercó a dar leves caricias en el cabello de Kook mientras hacían contacto visual.

-Gracias por tomarte el tiempo de enseñarme. -Dijo el menor para romper el hielo.

-No hay de qué. -Rascándose la nuca con algo de nerviosismo.

-Estás colorado.

-No, no lo estoy.

-Si, mírate. -Este sacó un pequeño espejo de su mochila para reírse de él.

-Mocoso, ven acá. -Ambos comenzaron a jugar como niños pequeños hasta que ambos quedaron muy abrazados en el piso mirando el techo.

-Deja de burlarte de mí o me las pagarás, Jeon.

-No tengo miedo.

Ambos voltearon a verse, y ahí fue cuándo de un momento a otro sus labios estaban juntos, Min se acercó a besarlo al fin, Con un dulce beso para al final sonreír y dejarlo con un abrazo.

☆.。.:*☆.。.:*☆.。.:*☆.。.:*

-¡Ah!

-¿Estás bien?

Min volvió a despertarse de golpe, lleva una semana así.

-Si, cariño. Solo que sigo teniendo sueños raros, ¿Puedo tomar un café o un té?

-Claro que sí, esta vez cuéntame que soñaste.

El más pálido tragó saliva en seco y asintió.

-Gracias por el café, te adoro. -Dijo este dando el primer sorbo a su café. -Verás, he estado soñando con JungKook.

Kim devolvió el té y lo desparramó en la mesa, mientras estaba tosiendo como abuelita.

-¿¡Qué?

-Así es, estoy igual que tú, pero no sé porque.

-¿Que tipo de sueños son? -preguntó este curioso, aunque no debió haber hecho la pregunta eran las 6 de la mañana.

-Cosas románticas.

Desde lejos se escuchó como se le rompió algo por dentro a Tae, el comenzó a pensar que Min ya no lo quería más y por eso el soñaba tal cosa.
En resumen, podemos escuchar como se le revuelve todo el estómago con esas palabras

-Oh...

-¿Que sucede, Cariño?

-¿Ya no sientes algo por mí?

-No, no es eso, no digas eso. Tengo estos sueños desde que me caí, apenas tengamos tiempo acompáñame con el neurólogo y así no tener estos sueños feos.

-Esta bien. -Dijo este haciendo un leve puchero.

𝙼𝚢 𝚑𝚘𝚗𝚎𝚢 ☁︎ TᴀᴇGɪDonde viven las historias. Descúbrelo ahora