.
.
.Resulto que la invitada de Jaebeom se quedaría por un tiempo en el castillo por petición de Jaebeom. Eso sin duda era lo que más le ardía en el pecho, así gruñir a su omega de celos pero sólo podía hacerlo callar para contenerlo.
Le molestaba verlo por ahí del brazo con ella, pareciendo muy alegres riendo de cualquier cosa que seguro eran estupideces. Gruñó en sus adentros por verlos en el otro extremo del jardín, escuchando a la mujer reír como idiota y Jaebeom igual, solo que el no exageraba su risa. En verdad era molesto.
— ¿Listo?
— Ah sí, solo-.. Deja la ensillo.
Había olvidado por un segundo que Jinsung estaba ahí. Unos días antes se invitó solo para montar un poco dentro de los terrenos del castillo. Accedió gracias a su ridícula madre que solo quería quedar bien por que veía como el alfa perfecto para su hijo, que para el era más falso, solo quería verse reflejada en el para sentirse útil en su "casi próximo noviazgo".
Quería quedarse al margen por su actitud cuando llegaba Jinsung, no quería tener malos pensamientos, pero sinceramente su madre le dio una charla donde le había dado los peores consejos de como mantener a un alfa contento y como no dejarlo ir. Pero por favor no tenia ánimos ni energía para esas cosas, y menos quería darle alas a Jinsung, por que si llegaba a pedirle matrimonio lo rechazaría de inmediato.
— En verdad me alegra que estamos pasando tiempo juntos..
— ¿Eh-..? Ah, si.. A mi también.
— ¿Te noto algo tenso, te sientes bien para ir a montar?
— Si, si, solo que últimamente con el entrenamiento.. Es algo tedioso.
— Jinyoung por nada del mundo te vayas a rendir, eso te pertenece. — dijo cambiando el tono de pronto, poniendo nervioso al príncipe que solo mantuvo su postura y asintió sonriendo. Trepando luego a la yegua y tomando las riendas.
Cuando el alfa también se trepo al caballo que montaría, los guiaron fuera de los establos por donde paso precisamente Jaebeom y la chica que venia sonriente junto a él, alegando que recordaba sus días de montar y que se podían prestarle un caballo. Enseguida encaminó a la yegua poniéndose cerca de ellos.
— ¿Qué creen qué hacen?
Jaebeom se giro al verlo montado en la yegua junto al otro alfa que se puso a su lado. Quitando su sonrisa y poniéndose serio con tan solo ver que tenía la compañía que no deseaba. Era sumamente molesto al verle tan seguido. Así se posicionó delante del corcel que llevaba Jinyoung y se cruzó de brazos. — ¿Pedir un caballo?
— ¿Con qué permiso? — preguntó alzando la ceja, viendo cómo la mujer que estaba a lado de él, se encimaba en su cuerpo y reía cínica.
— ¿Que acaso no podemos tomar un caballo prestado? — preguntó Jaebeom sonando irritado.
Jinyoung sonrió y rio. — No sin mi permiso. Estos caballos me pertenecen.
Jaebeom sabía que tenía razón. Podrían pelear por la corona ahora, pero todo dentro del castillo pertenece directamente al hijo del rey fallecido y tenía derecho a reclamarlo. Pero con oírlo decir de esa forma tan altanera como si fuese un niño señalando lo que era suyo. Le contestó. — Podrán pertenecerte ahora, pero no muy lejos esto será mío también.
ESTÁS LEYENDO
Crown ; 𝖩𝖩𝖯
Historical FictionUn amor prohibido, y un trono por el cual ambos matarían por tener. El rey y padre de Jinyoung ha muerto, y se arma una lucha por quien será el próximo heredero al trono. Por que al parecer, el hermano de su padre, Jaebeom, tiene por derecho a recl...