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1O

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Al ver como Jinyoung se había levantado de su asiento para ir a abrazar al alfa, que lo tenía ya molesto con su visita, se contuvo por no soltar un gruñido que lo descubriera con la reina que miraba orgullosa el trato cariñoso que le daba el omega al hombre.

Wheein se burló por dentro al ver a su amigo celoso hasta morir, solo se concentró en el desayuno que le sirvieron a la mesa, tomó un trago a su café y disfrutaba de la vista del jardín.

Mientras tanto Jinyoung también recibía un beso en la mejilla de por parte de Jinsung. Que se sorprendió por el recibimiento del príncipe, cuando antes con su confesión había reaccionado de forma seca y distante. Pero no dudo en corresponder al abrazo, apretando con una ligera fuerza sus caderas, sintiendo el respingon del omega que solo se separó de inmediato y tomó su mejilla con una sonrisa.

— Que agradable el que me recibas así. — tomó su mano y dejó un beso en ella. Sintiendo la suavidad de su piel. — Ojalá sean muchas más las veces en las que te alegres de verme.

— Ah sí.. ¿Quieres sentarte? ¿Te ofrezco algo en especial? — Jinsung asintió, tomando el asiento a lado de Jinyoung que le llevó de la mano.

— Woa cielo, sin duda hacen una pareja tan hermosa. — comentó su madre poniendo la mano en su pecho con una cara contenta.

Pero Jaebeom no pensaba lo mismo. Con solo ver la acción que hizo de tocar las caderas de Jinyoung le hizo enfurecer. Se que podría sonar exagerado, que tal vez lo suyo con el príncipe solo fue sexo, - o eso fue para el omega - pero sin duda el a ver compartido su celo con el, sentía cierta importancia y derecho sobre su cuerpo y él mismo.

— Entonces.. ¿A qué se debe su visita?

— Ah. Eso a usted no creo que le interese, vine a ver a Jinyoung.. No a usted.

La reina y Wheein olieron la tensión en el aire. Solo suspiraron y esperaron a que Jaebeom respondiera a esa respuesta. Sin embargo Jinyoung, solo podía fingir estar contento por que Jinsung le visitará, pestañeando coquetamente, - poniendo más de mala a Im -.

— Mm, solo preguntaba.. Ya que no vaya a ser que quiere propasarse con mi "sobrino". — dijo recalcando la palabra, siendo botada por el príncipe que alzó la ceja y mordió la labio interior para soportar el que le allá llamado así.

La mujer quedó sorprendida por lo que dijo, eso sonaba fuera de lugar y grosero. Ya que ella creía que Jinsung era incapaz de propasarse con su hijo. — Lord Im.. No creo que-..

— Lo siento Minjung, creo que mejor me retiro. Perdí el apetito. — mencionó con molestia contenida, dando una ultima mirada a Jinyoung que paso de verlo, solo frunciendo sus labios. — Vamos Wheein.

— ¿Eh? Pero apenas estaba-..

— He dicho que vamos. — tomó su muñeca, levantandola de la mesa. Haciendo que dejara su comida en su plato.

Wheein sabía que su amigo estaba a nada de estallar. Pero no por eso tenía que prohibirle dejar la comida, después se desquitaria con el. Tomó un pedazo de pan dulce de la cesta y también hizo una reverencia a los presentes. — Compermiso majestades.

Jinyoung ni siquiera le dirigió la mirada a la chica. Simplemente al verla llegar ya lo tenía mal sin saber por qué. O tal vez sí, pero no quería aceptarlo.