<< Solo un rato. >> Se convencía asimismo, pero aunque trataba de darse esos ánimos, no quería dejarlo solo.
Se sentó de nuevo en la silla, faltaban 5 minutos para la hora exacta en que Urss dijo que sería la celebración. Se preguntó ¿Realmente los demás podrían celebrar como si nada? No solo Austria, Polonia, Yugoslavia, Israel y Francia estaban en pésimo estado. Los tres primeros seguían inconscientes, mientras que Francia despertaba a ratos y volvía a caer profundamente, no tenía tantas fuerzas. Pero, era egoísta pensar que no deberían celebrar, al fin y al cabo, habían vencido en una guerra que se veía imposible de ganar desde el principio.
Llevó sus manos hacia su rostro, presionando suavemente sus sienes. Soltó un suspiro y miró al austriaco recostado en la cama, lucía tranquilo, pero no quería arriesgarse. Unos suaves golpes se escucharon en la puerta a la enfermería, giró hacia esta encontrándose con Filipinas observándolo con una pequeña sonrisa.
—Buenas noches, México.
—Buenas noches, Fili. —le sonrió, observando el hermoso vestido que llevaba puesto, quizá cortesía de la gente de Francia. —Te ves muy bonita.
La chica sonrió sonrojada, observando con mayor detalle al mexicano. USA le había prestado un traje elegante sencillo pero que le hacía resaltar bien. Pudo notar también que de su cuello colgaba una placa con su nombre y el apodo "201".
—También te ves muy bien.
—Eso espero, porque no me gustaría ser el único con mal aspecto.
— Yo creo que eso sería imposible. —Dijo con una risita. Se mantuvieron en silencio y finalmente ella se acercó en un momento en que él desvió la mirada hacia Austria. —Yo...Escuché que los niños dijeron que tu y...Bueno...
México le sonrió, comprendía. Le dio un suave apretón a la mano del austriaco y se levantó.
— Es mi ex esposo. Pero en cuanto despierte, haré mejor las cosas. Haré todo lo posible porque funcione.
Filipinas miró a ambos, tan solo fijar la vista en los ojos del latino podía darse cuenta de lo enamorado que esta por aquel que dormía. Sonrió y le tomó del hombro con gentileza.
—No pierdas la esperanza, se que él despertará.
Su sonrisa se ensanchó al escucharla, sabía que Austria podría despertar, estaba seguro. Le dirigió una última mirada a su amor y volteó hacia la filipina.
—Vamos, seguro que ya comenzaron.
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Las risas se lograban escuchar en el salón. UK había logrado llevar a Francia a divertirse un rato, aunque solo estuviera descansando sobre una silla mientras miraba a todos y platicaba con quien se le acercara. USA llenó su copa de nuevo mientras escuchaba el increíble sueño que Rusia había tenido, donde casualmente, el americano había sido su héroe. Le daba ternura que tuviera una imagen tan fuerte de él, aunque a veces pareciera pasar la admiración. Extrañaría a ese energético niño cuando tuviera que irse, sabiendo que probablemente jamás podrían volver a convivir tan de cerca.
—Oh, ¡mire, señor USA! Es el señor México, ahí viene.
El nombrado miró en la dirección en que el pequeño miraba, fue una sorpresa que Filipinas pudiera convencerlo. Levantó su mano desocupada para hacerle señas al mexicano, quien en cuanto lo vio no dudó en ir hacia él.
—Me alegra que hayas venido.
—Bueno, un rato no le hará daño a nadie ¿no?
El estadounidense le pasó una copa llena y, con el pequeño ruso jugando junto a ellos con Estonia y Kazajistán, comenzaron pláticas amenas. Un rato después se unió Brasil a la plática, y momentos después, Urss. Minutos más tarde, una sonada tranquila inundó el salón a petición de Francia. UK, con cuidado, le invitó a bailar, cosa que hizo a los demás querer unirse. Checoslovaquia fue de los únicos que prefirió sentarse alejado de todos y evitar ese baile. Se podía ver a los pequeños soviéticos bailando agarrados de las manos mientras Rusia y Ucrania invitaron a unirse a su baile a los gemelos alemanes, que de la mesa donde Urss les permitió sentarse no se habían movido.
USA prefirió salir a tomar aire fresco mientras tanto, y quizá el mexicano habría hecho lo mismo, de no ser porque Filipinas parecía querer unirse al baile pero no había alguien que aún la levantara. Se acercó a ella, no quería que hubiera gente deprimida dentro de aquella celebración, y extendió su mano ante la mirada sorprendida de ella.
— ¿Te gustaría bailar?
Ella sonrió, asintiendo y tomando su mano para levantarse y caminar hacia donde los demás bailaban. Tomaron posición y comenzaron con su baile, para mayor sorpresa de la filipina, el mexicano sabía bailar ese tipo de ritmo perfectamente. Y no era para menos, sabía bailar gracias a Imperio Español, pero su verdadero gusto por ese tipo de baile comenzó con Austria. En el baile en el que fue presentada su unión, en su boda, en sus ensayos, cuando cumplieron felizmente un año de casados. Levantó suavemente la mano de Filipinas y le hizo dar un suave giro, regresándola después a él.
Pero ella no es Austria.
Apegó a la mujer a su pecho suavemente de forma que ella no pudiera ver su rostro, la mirada del mexicano se perdió mientras seguían el baile. Amaba a Austria, esperaría el tiempo necesario, pero su mente le jugaba en contra haciéndole pensar que ella era su Austria. Quería pretender que lo era como una suave almohada impidiendo su fuerte caída.
— ¿México?
La separó de él para poder mirarla, ella lucía sonrojada y le miraba con confusión. Le sonrió y poco a poco la soltó aprovechando que la melodía llegaba a su fin.
—Lo siento, ¿quieres una copa?
Todavía confundida, aceptó y fueron hacia la mesa. El mexicano sirvió dos copas, entregándole una a ella y platicaron un rato más. Minutos después el estadounidense ya había vuelto y platicaba alegremente con Filipinas y UK, así que aprovechó ese momento para irse y volver a la enfermería. Antes de poder salir de salón, una suave mano le detuvo.
— México, dame un tiempo, creo que puedo tratar a Austria, igual que a los demás.
Si había alguien ahí que no descansaba por más heridas que tuviese, era Francia. México le sonrió, estrechando su mano agradecido.
—Confío en ti, Francia.
Y con una pequeña sonrisa, regresó a la enfermería.
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||° ¿Alguien sigue leyendo esta historia? quq perdón, quería hacerle un dibujo porque me imaginaba la escena del baile con la canción "Perfect" y en serio quería hacerlo, pero por más que boceteaba nunca me salió x,d así que lo subí así. Gracias por leer y seguir esperando actualización. <3 Definitivamente terminaré esta historia, no me gusta dejarlas empezadas. Además traigo una noticia, se hará una week AusMex (la vi en Twitter) y quiero participar jaja así que si les interesa leer mi versión fanfic de esta week, la subiré a Wattpad tratando de ser constante en los días. ^^ ¡Nos vemos! Se cuidan mucho.
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Quédate conmigo. [ México x Austria ]
FanficMarzo-1938 La Alemania Nazi desea anexar a la nación austriaca, quien sufre por ello al saber que no tiene salida de esa terrible pesadilla. Austria no se espera la llegada y el ferviente deseo de parte de cierto mexicano para protegerlo, aún cuand...